loader image

Jaime Chabaud Magnus*

Si los funcionarios de Secretaría de Turismo y Cultura, los altos mandos, tuviesen conocimientos mínimos de lo que significa abrir un Espacio Cultural Independiente en el estado de Morelos, nos besarían los pies, nos pondrían monumentos, exigirían presupuestos para hacer una red en todos los municipios y financiarlos en un esquema mixto. Si supieran lo que cuesta abrirlos y crear una fidelidad de públicos crearían una cartelera general para que los morelenses pudiesen gozar de su derecho constitucional a la cultura y harían campañas de Teatro Escolar para que los niños y adolescentes visitasen esos espacios como si de centros de culto se trataran. Si consideraran que apoyar a los Espacios Culturales Independientes es agradecer lo que hacemos y/o somos coadyuvantes de la labor que al gobierno le tocaría realizar, aunque con un mínimo de gasto operativo y sin una onerosa burocracia, vendría a ellos el gobernador en turno para ponernos de ejemplo de cómo la sociedad civil organizada puede ser motor de la reconstrucción del tejido social de las comunidades.

Si hubiese un mínimo de inteligencia ahí, en esos oídos sordos, cuando menos vendrían y pagarían su entrada y se robarían las ideas que a ellos les faltan para promover, producir y distribuir los bienes culturales de los que tanta urgencia tiene nuestra población, aunque no lo sepan. Y es que no lo sabe nuestra gente porque el 90% de ellos, nuestros conciudadanos, no han tenido acceso a su derecho constitucional a la cultura. En las escuelas, salvo casos honrosísimos, no se les dan clases de artes, no se les lleva a museos o teatros, no se promueve la lectura. Tener un pueblo eunuco en su imaginación y capacidad de crítica es un gran negocio, deliberado. Por cierto, seguimos esperando que los pre-pre candidatos a gobernador hagan público su Proyecto de Cultura para el Estado. Ni uno solo ha dicho pío. Perdón por decir lo obvio, pero apúrense a tener uno.

Y, sin embargo, hay buenas noticias porque siguen perviviendo espíritus libres y un poco locos como el de Violeta Sosa y Óscar Santín que han abierto en el corazón de la cabecera municipal de Yautepec el Foro Artha, calle Virginia Fábregas 24, col. Benito Juárez. ¡Qué bonito que en la calle que lleva el nombre de una de las más grandes actrices y empresarias teatrales de la historia de nuestro país aparezca un pequeño foro con 55 butacas de capacidad! ¿Qué diría doña Virginia, matriarca de toda una dinastía de actores-directores y dueños de grandes teatros en CDMX? Seguro los protegería, los apoyaría con dinero, les regalaría equipo, los alentaría a nunca rendirse porque el amor por su pueblo natal y su estado la llenaría de gozo. Estoy seguro de que el espíritu de doña Virginia Fábregas protege a Oscar y Violeta en este loco y urgente emprendimiento para que pueda crecer y prosperar. ¡Larga vida a Foro Artha!

Inaugurado en diciembre de 2022 con un concierto de Violeta Sosa, Foro Ahrta estará en permanente construcción porque sus cabezas se sacan del bolsillo lo que pueden para ir poniendo poco a poco algo más de infraestructura. Por lo pronto el escenario tiene una profundidad de 2.20, por un largo de 3.60 y una altura de .60 metros. Su equipo de luces es apenas suficiente para lograr iluminaciones decorosas, aunque el equipo de sonido es su fuerte. Es decir, desde la precariedad, pero con un espíritu indomable y llenos de fe en que las artes pueden cambiar su entorno, Sosa y Santín se parten el lomo para que presentaciones de libros, conferencias, talleres, cine, conciertos, teatro para adultos y niños ocurran en el pequeño espacio. Otros entusiastas colaboradores completan el staff: Gerson Buitrón, David Alarcón, Jeison Rodríguez y Luis Alcaraz.

Si hubiese inteligencia -ya no digamos sensibilidad que eso los haría más humanos-, nuestros funcionarios harían asociaciones estratégicas con los espacios culturales independientes; colaboraciones que también serían estrellitas en la frente para los servidores públicos y con un costo que es muy inferior al que su responsabilidad los obligaría si cumplieran con el mandato constitucional al que están obligados.

* Dramaturgo, docente y periodista de medios locales, nacionales e internacionales. Un par de personas sonriendo

Descripción generada automáticamente

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *