Miguel A. Izquierdo S.
En pleno centro de Jiutepec, calle Mirador 13, se localiza este pujante Centro Cultural, sostenido por la ciudadanía del rumbo, con la colaboración entusiasta de jóvenes y adultos vecinos, quienes a lo largo de casi tres años han venido consolidando este espacio de encuentro, de creación de comunidad, mediante las artes y otras manifestaciones educativas y culturales.
Su sede es la casa del asesinado luchador social y por el medio ambiente, Isaac Medardo Herrera Avilés, quien junto con tantas y tantos jiutepequenses han dado la lucha por hacer del Parque de los Venados, un espacio público, de los que tanta falta hacen en este municipio. En honor a él, su familia ha autorizado que su casa sea usada con fines culturales, labor que con creces han estado haciendo agrupaciones varias de jóvenes músicos y talleristas de manualidades y artes.
En estos días, están celebrando con el Festival Xotla, iniciado el 4 de junio y que cierra el domingo 11, con conciertos, exposiciones y presentaciones varias, talleres y convivencias. Sí, es motivo de fiesta que quienes lo sostienen, se ocupen alegremente de promover actividades valiosas para infantes y jóvenes, para adultos de todas las edades, brindando espacios y tiempos de realización personal y grupal. La generosidad campea por este Centro Cultural, unos enseñan a otros, todo mundo vale e importa, chicos, medianos y grandes, cada quien tiene algo para aprender, para enseñar, para regalar, en aras del crecimiento conjunto de sus miembros.
Durante la pandemia, sus organizaciones no se paralizaron, aprendieron a usar los medios electrónicos para no suspender sus servicios, crecieron en capacidades y habilidades, atrajeron a más personas a la causa cultural, crecieron cualitativa y cualitativamente, dieron muestras suficientes de que el movimiento, su movimiento, tenía que superar las condiciones adversas, y sin duda lo escribo, no se “arranaron”, como otras instituciones, que tomaron como excusa la pandemia para cerrar sus puertas por tiempo exagerado, privando de valiosas oportunidades a la ciudadanía de servirse de ellas.
Ahora, desde el grupo Amanecer, y con el apoyo de las personas a cargo de la biblioteca Amatlajtoli, como de El Garabato (ilustrador y cuentista) y el Escuadrón de lectores, saben hacer videos, teatro con títeres, dramatizar y musicalizar cuentos infantiles, han creado ensambles musicales varios, siguen dando clases de música y de varios instrumentos, pero sobre todo, lo hacen con genuino convencimiento y entusiasmo, que atrae a cualquiera que se acerque a ellas y ellos. No sólo les preocupan sus infantes y jóvenes, les ocupan, les tiene organizados para imaginar y crear oportunidades en que jugando, haciendo artes, crezcan felizmente. ¿Verdad que eso tiene gran mérito?
Así que aprovechen este Festival para conocerles, para animarse a colaborar con este Centro Cultural, y quizás, se animan a participar en sus talleres. Nos viene muy bien a todes. Llamen al 777 303 1723 para más información
