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Amanda Ortiz*

Trabajando desde el NODESS Morelos Solidario y Cooperativo en acciones concretas, visibles y viables que fomentan los Objetivos del Desarrollo Sostenible. El proyecto de huertos escolares en Cuernavaca es una alianza con La Ventana Infinita CreAcción Social con colegas de la UAEM de las facultades de Artes, Agropecuarias y Nutrición y la Dirección de Educación Ambiental y Vinculación Estratégica de Gobierno del Estado. El equipo de trabajo hemos colaborado ampliamente en promover prácticas educativas para la agricultura sostenible, como la elaboración de composta y la rotación de cultivos por citar unos ejemplos. Así mismo, generar estrategias ante la crisis ambiental, social y de salud de la población en nuestro país. Consideramos urgente que la formación de las personas respecto a la problemática del ambiente sea una constante en todos los ámbitos posibles. Hemos realizado talleres en la Escuela Primaria Montessori Nautilus y en la Escuela Preparatoria Federal Por Cooperación Andrés Quintana Roo con niños, jóvenes y profesores. Las actividades fueron hechas pensando en generar empatía con la naturaleza, las cuales incluyeron 1. juegos de integración y ejercicios de vinculación y sensibilidad, donde los jóvenes hicieron visible el compromiso hecho para el cuidado de su parcela (fig. 1).

Figura 1. Compromiso de los alumnos con su parcela

en la Preparatoria Andrés Quintana Roo, Chamilpa,

Cuernavaca, Morelos.

2. siembra de semillas: rábano, cilantro, lechuga y espinaca, entre otras y plantación de lavanda, lantana y salvia; 3. actividades artísticas donde los niños y los jóvenes con pinturas y materiales reciclados decoraron el área de siembra. Además, experimentaron texturas y aromas de plantas medicinales en los talleres de teñido e impresión herbal (figura 2).

Figura 2. Taller de impresión herbal. Preparatoria Andrés Q. Roo, Chamilpa, Cuernavaca.

4. recibieron también información sobre la importancia ecológica, social y cultural de un huerto, de los usos y cuidados de las plantas ante la presencia de plagas y enfermedades, sin dejar fuera la importancia de las especies polinizadoras. También se incluyó información sobre la alimentación saludable, la cual incluyó la aplicación de un cuestionario diagnóstico. Durante las diversas actividades, particularmente en la Preparatoria, algunos estudiantes compartieron experiencias sobre el huerto familiar que cada uno tiene en casa. Otros ejemplos del cultivo de plantas en espacios como los hogares son un indicador de la importancia que esta práctica tiene. La comunidad participante en proyectos como éste, o quienes toman la iniciativa de manera individual, además de aprender técnicas de producción autosustentable, propias de huertos urbanos, pueden construir la noción de sostenibilidad, en sus dimensiones social, ambiental, cultural y económica, así como desarrollar capacidades para la participación y la colaboración. El proyecto de huertos escolares en Cuernavaca, además, busca promover el huerto como espacio para la conservación de la diversidad biológica y cultural del estado de Morelos. Es un proyecto educativo que fomenta la participación comunitaria mediante el arte, es un método integrador, lúdico y sensibilizador, ideal para el trabajo participativo con niños y adolescentes. Esta nota es hoy, una invitación al lector a reflexionar juntos en, ¿cómo y por qué es importante fomentar buenas prácticas que impacten en tener una vida sana?, ¿mientras más empáticos seamos con la naturaleza, mayor probabilidad de notar la complejidad de los problemas ambientales, y de actuar para el cuidado del ambiente?

*Académica del Centro de Investigación en Biodiversidad y Conservación de la UAEM. Miembro del NODESS Morelos Solidario y Cooperativo.

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