URIEL CARMONA, PRESO POLÍTICO
Jorge León Schiaffino Pérez*
Queridos lectores mi nombre es Jorge Schiaffino abogado de profesión y político por convicción, mi vida ha transcurrido entre el Servicio Público, los Partidos Políticos, las Cámaras de Diputados y la vida pública de México y sus instituciones, he tenido la posibilidad a lo largo de 30 años de hacer política en la CDMX y en el estado de Morelos. Decidí dedicarme a la política porque me viene de familia, lo traigo en la sangre soy un convencido que el Servicio Público tiene, desde cualquier perspectiva que ser utilizado en beneficio de la gente y en beneficio del desarrollo del país.
Agradezco la posibilidad que me otorga LA JORNADA MORELOS de, a partir de esta fecha, formar parte de su grupo editorial en el que espero podamos leernos semana a semana y entender cuáles son LOS JUEGOS DEL PODER, en la política mexicana y sobre todo en la política del Estado de Morelos.
Lo ocurrido el pasado viernes no es un tema menor en la vida pública de Morelos y de su gente, se trastocó, se vulnero, se pisoteo el Estado de Derecho, entendido como el conjunto de leyes que rigen la vida pública del país y de sus instituciones pasando por el Estado Mexicano.
Se refiere al principio de gobernanza por el que todas las personas, instituciones y entidades, públicas y privadas, incluido el propio Estado, están sometidas a leyes que se promulgan públicamente y se hacen cumplir por igual sin distingo ni circunstancia alguna. De ahí la división de poderes representatividad subjetiva del Sistema Político Mexicano.
De ahí que lo sucedido esta semana en el estado de Morelos tenga tantas interrogantes respecto del debido proceso, respecto de la intromisión de poderes, respecto de la esfera de competencia y el alcance jurídico de la Fiscalía de la CDMX.
Luego entonces, qué pasa con los Organismos Autónomos y para qué fueron creados o con qué fin en México.
El asunto de la detención de Uriel Carmona debe preocupar a los habitantes de Morelos, a los empresarios, a ustedes queridos lectores, a quienes viven del turismo, vocación de Morelos perdida hace años. En fin a todos aquellos a quienes se les puede aplicar la ley y sus sanciones.
Decía yo, que no es cosa menor el atropello a las garantías individuales, el atropello al debido proceso, el atropello a su dignidad como ser humano.
La detención del Fiscal, estuvo plagada de errores procedimentales en materia penal, el Fiscal afrontó la audiencia inicial, a puerta cerrada, la medida cautelar impuesta por el juez no ameritaba, por la particularidad del delito, prisión preventiva.
Pero sin duda, lo preocupante del asunto es la intromisión a la autonomía, la independencia y la competencia de los Poderes de La Unión, la semana pasada la Suprema Corte de Justicia de la Nación, la segunda sala, determinó que el Fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara, gozaba del Fuero Constitucional, que le permite no ser detenido sin antes ser desaforado.
Para muchos la credibilidad en la actuación de la Fiscalía de la Ciudad de México ha quedado en entredicho, horas antes de la detención de Uriel Carmona en Cuernavaca, había logrado un amparo en contra de la propia intención de la Fiscalía de la CDMX, de detenerlo, cosa que a la Fiscalía, no le importó y aun así cumplimentó una orden de aprehensión viciada de origen.
Lo verdaderamente preocupante más allá insisto del proceso penal, de la detención ilegal o no de Uriel Carmona es el precedente que deja la actuación del Poder Público en México, es decir hoy esta detención huele más a persecución política, a venganza política, que a justicia penal o social para Ariadna y la terrible circunstancia en que perdió la vida. Además de ser un retroceso en la democracia de México.
Asunto que, por cierto, no ha sido esclarecido del todo por la Fiscalía de la Ciudad de México, porque debemos recordar que el cuerpo de Ariadna fue dejado en los límites de Cuernavaca y de Tepoztlán en Morelos y no nos han aclarado, si en el transcurso o en el trayecto de la Ciudad de México a Morelos ella habría ya perdido la vida.
Igual de grave se vuelve la una como la otra, es decir, es igual de grave que no se haya llegado a la verdad histórica de las causas de la muerte de Ariadna pero también es igual de grave que se le haya inventado o fabricado un delito a una autoridad del Estado de Morelos, la que goza de Fuero Constitucional, federal y local y peor aún la intromisión a la esfera de competencia de los Poderes de la Unión y el tiempo nos dirá si URIEL Carmona Gándara es un PRESO POLITICO.
Esperemos en qué termina esta circunstancia política que afecta de manera directa al estado de Morelos a su gobierno y a los ciudadanos que aquí habitamos. El próximo 7 de septiembre está fijada la siguiente audiencia en el proceso que se le sigue al fiscal de Morelos, Uriel Carmona Gándara.
*Político, Padre de familia, en la búsqueda de un mejor Morelos para todos.
