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La tala clandestina en Morelos no solo tiene un impacto en el deterioro del medio ambiente, sino que también afecta a la medicina tradicional, ya que muchas de las especies taladas se utilizan en la elaboración de sus medicamentos.

María Feliciana Arredondo Barrera, integrante del Instituto Mexicano de Medicina Tradicional “Tlahuelli”, lamentó la tala desmedida en la entidad. Mencionó que especies como el pino, de donde se extrae una planta llamada pulmonaria, están siendo taladas sin control, lo que resulta en la pérdida de recursos medicinales valiosos. Además, señaló que muchas especies silvestres también están siendo destruidas.

A pesar de ser un delito que se comete principalmente en la zona de Huitzilac, en áreas protegidas como las Lagunas de Zempoala, también se registra en la Sierra de Huatla, donde especies como la canceriana prácticamente han desaparecido.

Arredondo destacó que la tala representa la degradación de la tierra, ya que se llevan las semillas y algunas plantas son anuales y, una vez taladas, ya no vuelven a crecer. Además, mencionó que la escasez de ciertas especies medicinales, como el cuachalalate, se está reflejando en el aumento de los precios en lugares como el Mercado de Sonora en la Ciudad de México.

Llamado a la protección de los bosques por parte de autoridades y ciudadanos

Dado que la medicina tradicional desempeña un papel crucial en la prevención de enfermedades, es de vital importancia establecer cultivos y áreas protegidas. María Feliciana Arredondo instó a las autoridades a crear e implementar protocolos para la preservación de estas especies y llamó a los ciudadanos a formar comités de vigilancia en estas áreas.

La experta también señaló que la presencia y actividades de organizaciones delictivas en estas áreas obstaculizan los esfuerzos de las autoridades.

Además, mencionó que los programas de reforestación no están siendo completamente efectivos, ya que no se están plantando las mismas especies que se están talando, lo que también afecta a la medicina tradicional.

“El programa Sembrando Vida, en muchas ocasiones, no es tan efectivo porque no se están reforestando las especies afectadas. Algunas de estas especies son endémicas y no se están replantando, lo que representa un problema adicional”, afirmó.

Las especies taladas tienen diversos destinos, pero es común que el palo de Brasil, por ejemplo, se utilice como leña, lo que es una situación sumamente lamentable.

 

Persona con lentes sonriendo

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Foto: Angélica Estrada