LENTO PERO SIGNIFICATIVO AVANCE DE LA COMUNIDAD LGBTQ+ EN EL ENTORNO SOCIAL.
SAUL DIAZ*
Día con día la participación social de la comunidad LGBTQ+, es cada vez más, en todos los ámbitos; en esta ocasión y en referencia al próximo inicio del tan anhelado año electoral 2023- 2024, hablaremos específicamente de los avances en el ámbito público y político en nuestro país y estado.
La protección de los derechos humanos abre la puerta entre muchas la de la inclusión y respeto dentro de la democracia, sin duda un paso más después del reconocimiento de diferentes derechos como lo son el matrimonio igualitario, identidad de género entre otros; como lo es también el acceso a cargos de toma de decisión publica por la vía democrática.
Algunos ejemplos relatan desde el año 1997, donde por primera vez y plenamente reconocida y quien fue una de las primeras impulsoras del reconocimiento legal en favor a la comunidad LGBTQ+, llego a la cámara baja del Congreso de la Unión una mujer lesbiana, en el 2011 una persona transgénero llego a ser precandidata al gobierno del Estado de Hidalgo, en el 2016 la primera también persona transgénero como regidora del ayuntamiento de Guanajuato, en 2018 dos mujeres lesbianas integraron la LXIV legislatura en la cámara de Diputados Federales, y hasta este 2021 mediante una resolución emitida por el TEPJF que ordeno al INE solicitar y registrar personas de la comunidad LGBTQ+, por la vía de representación proporcional y de mayoría relativa a personas de este grupo históricamente vulnerados como candidatas y candidatos a cargos de elección de ese año electoral, mediante el agrupamiento de acciones afirmativas; lo mismo ocurrió en nuestro estado donde mediante una resolución del Tribunal Estatal Electoral ordenó a la autoridad electoral estatal (IMPEPEAC), modificar los registros e incluir a nivel diputaciones locales y fórmulas de ayuntamientos la inclusión de acciones afirmativas en específico de este sector, gracias a esta acción actualmente podemos ver en diferentes cabildos de los ayuntamientos a personas de la comunidad LGBTQ+, siendo parte de la toma de decisiones de sus respectivos municipios.
Un avance lento pero verdaderamente significativo; ya que eso permite que personas totalmente identificadas con el sector puedan impulsar, debatir y concretar los rezagos que aún están pendientes, mientras que por el lado de los activistas sociales el papel a tomar ante este paso es y sin abandonar la lucha, es la de abordar la acción de la socialización al cien por ciento, ya que recordemos que no solamente son los integrantes de la comunidad LGBTQ+ los que sufren la discriminación, también en gran medida lo padecen su primer círculo familiar, amigos y demás personas con las que se convive el día a día; también y muy importante es involucrar a las nuevas generaciones en todo los procesos de esta lucha ya que eso provoca que sean ellos también los porta voces, socializar también es provocar que sociedad en general sea más empática y menos frontal al tocar el tema en las pláticas diarias que tenemos con las demás personas.
Para culminar, más allá de mantener presente la lucha en defensa de los derechos de la comunidad LGBTQ+ mediante el debate y el dialogo el cual siempre debe ser respetuoso tanto por los integrantes del sector como de la sociedad en general, es menester manifestar que al llegar a un espacio de toma de decisión también se tiene que procurar las necesidades que aquejan a nuestra sociedad como bien común, por eso lo digo y siempre lo diré “todo debe ser ganado, nada arrebatado”, y aplica muy bien dentro del ámbito democrático, ya que un buen demócrata sabe reconocer la derrota como principio para después hacer el mejor papel cuando resultado es toca ser una victoria.
Querido lector nos leemos en el próximo artículo.
*Promotor de la participación social en las nuevas generaciones
