¿REPROBADO EL 10?
Estimados lectores qué gusto saludarlos casi ya terminando el año, creo oportuno hacer un recuento cualitativo que no cuantitativo del estado que guarda la administración pública, desde la perspectiva ciudadana del estado de Morelos.
Para nadie es un secreto que hace cinco años el gobernador Cuauhtémoc Blanco nos dijo a los morelenses que no habría de fallarnos, que habría de meter a Graco Ramírez a la cárcel por ratero y porque estábamos viviendo el peor gobierno de la historia de Morelos decía el 10 .
Pero la realidad es otra…
Después de cinco años y sobre todo en este 2023 habría que dejar claras algunas situaciones que pasaron post pandemia en Morelos pero que de ninguna forma tienen que ver con el desaseo, el cochinero, la corrupción y el desgobierno de Cuauhtémoc Blanco en Morelos.
La pandemia dejó rezagos en materia económica, de salud, propició inestabilidad financiera sí, pero ya pasaron bastantes meses de entonces y hoy tendríamos que estar experimentando una recuperación económica y social en Morelos que no se ha visto. A poco más de 5 años del gobierno del exfutbolista no podemos destacar una acción de gobierno en Morelos que nos permita presumir en el país.
Por otro lado más del 52% de la población que considera Morelos un lugar lleno de corrupción, además, los secretarios de Estado que acompañan a Cuauhtémoc Blanco son invisibles, inservibles, insostenibles y que no se les conoce.
Hoy tenemos un estado inseguro, un estado con poca inversión, sin desarrollo económico, es un estado estancado en el Morelos de hace 35 años, ese es el estado anfitrión del mundo. El estado del 10. Pero más de 81% de la población en general, y sobre todo los jóvenes, consideran a Morelos un lugar inseguro, inestable y peligroso para vivir, en el que da miedo salir a la calle, sobre todo en la noche.
Sin duda, el primer contacto que tiene la sociedad con la seguridad pública es la policía, hoy a cinco años de este desgobierno con más de 5 mil homicidios en la entidad en un año, cifra histórica para Morelos, el 80% de la gente desconfía de la policía, no nos sentimos seguros en las calles, sentimos el miedo constante de la delincuencia organizada, sentimos temor por salir a la calle a caminar, a practicar deporte, al ir de compras, a comer a un restaurante o simplemente pasear por uno de los parques o zócalos en los municipios del estado que, dicho sea de paso, están descuidados, sin orden, sucios y con basura, Esa es la realidad de Morelos en el 2023.
Para que la entidad surja en el concierto nacional, es decir para que el Producto Interno Bruto de Morelos sea mejor, necesitamos una infraestructura carretera decente, moderna, que comunique de manera radial a las poblaciones del estado, para que así los productores no sean quienes son atacados, vapuleados, robados, estafados por los intermediarios quienes al final son los verdaderos ganones en el mercado. Se requiere mucha inversión carretera para facilitar a los campesinos el traer sus productos al centro del estado.
También hay que mencionar un tema que ataca fundamentalmente a los municipios con mucha densidad poblacional que es la movilidad y el transporte. Hace años que urge una legislación en materia de transporte, hay que restructurar el transporte público en Morelos, pues actualmente se atienden los intereses personales y gremiales de los transportistas que en muchos de los casos, tienen acuerdos de corrupción con las autoridades estatales; es inconcebible que a esta fecha no se cuenten con las tarjetas de circulación de quienes han ya pagado sus derechos vehiculares en el caso del servicio público de servicio privado mientras que al recorrer las calles, las avenidas, las rancherías, los caminos en el interior del estado, encontraremos una gran cantidad de rutas, peceros, taxis viejos en desorden, sin cumplir los temas ambientales, las verificaciones vehiculares, sumidos en irregularidades que, además, dañan al medio ambiente, tema omiso para el gobierno Cuauhtémoc Blanco al que no le conocemos una acción tangible en beneficio de la naturaleza.
Asumo que el señor no sabe si quiera que Morelos es un estado con gran vocación del medio ambiente y con un clima maravilloso, pues no encontramos políticas públicas claras en materia de protección al medio ambiente y en la lucha constante en contra el calentamiento global que ya nos ha cobrado facturas muy altas.
El tema de la salud es un tema muy complejo y que hemos abordado muchísimas ocasiones, pero habría que dejar muy claro el colapso en el que se encuentra el sistema de salud pública en Morelos, mucho más allá de no haber una coordinación estatal con los sistemas de salud federales como el IMSS y el ISSSTE; hoy el sistema de salud pública en Morelos está colapsado con la falta de medicamentos en más del 90% de sus clínicas y farmacias.
Con un primer nivel de atención deficiente, con un retraso en las citas médicas de más de tres meses, con las instalaciones sanitarias en las peores condiciones a decir de los trabajadores de la salud en el estado, locales y federales, hay un colapso inminente en el tema de salud en los próximos años si no se restructuran de manera puntual los servicios de salud pública, si no se atiende primordialmente al tema de la prevención en contra de las enfermedades crónico degenerativas y si no se recurre a una administración sana de los recursos y sobre todo si no se eficientan los servicios.
Muchos habremos pensado que, por sus orígenes, el gobernador habría de emprender un gobierno muy presente en el tema deportivo, pero ha sido todo lo contrario: jamás en la historia del deporte en Morelos quedó tanto en el olvido, jamás en la historia hubo programas educativos en conjunto con la Secretaría de Educación Pública con el IEBEM, para que las escuelas del estado, se hiciera deporte de manera conjunta ya no digamos deporte de alto rendimiento, sino deporte que le permitiera a la población no tener uno de los lugares más importantes en el mundo de obesidad infantil.
El año que entra será un año eminentemente electoral, un año de decisiones, pero hacia los primeros meses del año, se definirá quiénes serán las candidatas y los candidatos a los distintos puestos de elección popular, se volverá fundamental el trabajo de los partidos políticos, de la sociedad y de quienes abanderaran las candidaturas en Morelos.
Hace muchos meses he sostenido, que en Morelos seguramente gobernará Margarita González Saravia, y su reto fundamental será atacar la corrupción con la que se vive todos los días en el gobierno y la prevalencia de la corrupción respecto a la incidencia en la desconfianza de la población y un tema fundamental será la seguridad pública, preocupación principal y fundamental para los morelenses, que requerirá de una comunicación estrecha con los Presidentes Municipales y el mando coordinado, la interacción tendrá que ser cotidiana, palpable, tangible en los hechos, una sociedad comunicada con su gobierno, informada del actuar de su gobierno, es una sociedad responsable y enterada de su propio destino.
Veremos quién será capaz de aglutinar a los intereses de la población, de su propio desarrollo económico social y desde luego político, ese es el gran reto del próximo año para Morelos y para la política del estado, seamos claros y digamos las cosas de frente en los temas que el próximo Gobierno tendrá que atender. Y principalmente en aquellos que interesan a la sociedad, debido a la gran crisis de desgobierno que deja Cuauhtémoc Blanco, su familia y sus intereses personales.
Me despido, no sin antes desearles un feliz 2024. Que el año que viene sea de beneficios y paz para Morelos, su gente y su propio desarrollo.
Muchas Gracias.
*Padre de familia, político y soñador en busca siempre de un mejor Morelos para todos.
