Insistía que debíamos recuperar el pasado de nuestra historia cultural reciente en estudios serios que permitieran reconocer el avance de los creadores, escritores, cineastas, pintores, productores, músicos, todo aquello que tenga que ver con la cultura. En las páginas de la Jornada Nacional se puede encontrar un largo ensayo que le llamó “Escribir la Historia Reciente” génesis de su trilogía La Tragicomedia Mexicana. Cuenta ahí José Agustín Ramírez que el otrora partidazo Revolucionario Institucional le pidió hacer un retrato del México 1949-1970 en una extraña pero interesante solicitud del PRI. Afortunadamente el proyecto se truncó por la “poliquitería”, y el escritor tomó de manera muy personal y muy seria el proyecto y lo llevó después de años de muchas lecturas y fichaje de miles de textos al feliz término de la mejor crónica de los años cercanos. Crónica de ese México colorido, diferente y accidentado. Obra sin paralelo. Colosal reflexión de un país que todavía existe.
Fernando González Domínguez
