A José Agustín Ramírez le pareció sensacional “El cristo de Messina”, obra renacentista de Antonello de Messina. La enmarcó porque… “es una obra conmovedora que quiero mucho”, decía.
Al lado derecho del hombro del Cristo está colocado un ángel niño, acompañando su dolor; en su mejilla escurre una lágrima. La sangre mana en cada pincelada. En 1969, José Agustín compró el cuadro “La muerte del Che”, pintado por su hermano mayor Guty Ramírez quien creó la composición monumental de la paráfrasis de Cristo y el Che Guevara, el hombre-guerrillero.
En su casa en Brisas de Cuautla, conserva el mural transportable intitulado “La última cena en la biblioteca de Netzahualcóyotl” de Guty Ramírez. En el centro está Jesús-Cristo, portando una playera con la imagen de la Virgen de Guadalupe.
Lo acompañan los apóstoles: Sor Juana Inés, Lennon, Marx, Rivera, Vasconcelos, Netzahualcóyotl, Einstein, Jung, entre otros personajes. En la escena, los niños absortos en la lectura. Incluidos los hijos de José Agustín. La mascota, al lado de un infante. Allí están casi una treintena de personajes posando para la foto.
A José Agustín lo cautivó Modigliani. Gozó las artes en sus variadas expresiones.
Paz Matilde Osorio
