loader image

 

El terror de vivir en Morelos…

 

Hoy tendríamos que estar celebrando el Día del Trabajo y los resultados del esfuerzo conjunto en materia de desarrollo económico hacia fines del sexenio o cuáles han sido los avances en materia de oportunidades de empleo en el país y en Morelos.

Pero desgraciadamente el tema que nos sigue liderando y que sigue lastimando a nuestras familias es el tema de la inseguridad pública. Los feminicidios en Morelos ocupan el primer lugar del país, los ataques en plena luz del día en las ciudades más importantes están a la orden del día; los cuerpos tirados en la calle, las carreteras, en los poblados, es cosa de todos los días. Tan sólo esta semana hemos sido testigos en las redes sociales, en los medios de comunicación, al menos de cuatro asesinatos en la capital del estado.

Los comercios y la industria cierran de manera estrepitosa sus negocios por la extorsión que ocupa hoy los primeros tres lugares de la actividad delictiva en la entidad.

No hay desarrollo económico por la inseguridad pública en Morelos.

Debemos exigir una respuesta a las autoridades del Estado por la inseguridad pública y cuestionarnos si el modelo está siendo eficaz para la población, y le permite vivir con tranquilidad y en paz social.

Me parece que la barbarie de inseguridad: los índices de delincuencia, las ejecuciones, las amenazas, las extorsiones, forman parte ya de lo cotidiano. Es decir, a los habitantes del estado de Morelos, ya nada nos sorprende, las ejecuciones de esta semana en el interior de un hospital privado ponen de manifiesto el terrible trabajo de seguridad ciudadana en el que nos encontramos hoy día.

Tenemos una gran capacidad de olvido, y lo digo porque hace apenas una semana estábamos discutiendo si el Congreso del Estado tendría los tamaños de no otorgar una licencia al cargo de Gobernador del señor Blanco Bravo, totalmente inmerecida por la situación en la que entonces dejaba al Estado de Morelos. Hoy constatamos y dejamos claro que se equivocó el Congreso al permitirle al señor Blanco Bravo ir en busca de un premio de consolación por haber sido el peor Gobernador de la historia del estado de Morelos.

También, sin ningún afán de molestar a nadie, habría que preguntarle de frente al señor Ortiz Guarneros si de verdad cree que ha hecho un buen trabajo en materia de seguridad pública, y es que hoy a las seis de la tarde, en plena época de sol y de brillo para el turismo en los mejores meses del año, los comercios se encuentran cerrados, desolados sin un alma, porque hoy somos presa del miedo, de la inseguridad y con temor de salir a las calles, de no poder salir a pasear a los perros a tomar un refresco en compañía de la familia. Simplemente a disfrutar del privilegio de vivir en un clima como el nuestro, quizá eso es lo única que ya nos pertenece, los recuerdos y el clima de Morelos.

Estamos a 31 días de qué se celebren elecciones en el país de que haya un nuevo gobierno y, desde luego, de una nueva posibilidad de desarrollo y de tranquilidad para Mexico y Morelos.

Menudo paquete tendrá Margarita González Saravia para encabezar la mayor transformación de que se tenga memoria en Morelos y el tema fundamental de su política pública tendrá que centrarse en la seguridad pública. Insisto que el mando único o mando coordinado ha fracasado en su intento de traer seguridad pública y paz social.

Hoy necesitamos una política pública en materia de seguridad ciudadana acorde a las necesidades y a las demandas del pueblo de Morelos, lo que esta semana pasó en el estado, y particularmente en Cuernavaca es muestra de la incapacidad operativa y de resolución de las autoridades en materia de seguridad pública, y me parece que hoy la delincuencia organizada se pasea como en su casa, gracias a la política pública de seguridad ciudadana que implementó el gobernador Blanco y que permitió el desarrollo de un sinnúmero de grupos delincuenciales que encontraron en la ingobernabilidad su modo de vida a costa de la tranquilidad y la seguridad de los morelenses.

En los próximos meses se tendrá que hacer un gran esfuerzo en materia de seguridad pública, y es oportuno comentar que necesitamos mucha más capacitación policial en el estado, una restructura a los cuerpos policiacos y dotarlos de muchos más recursos, no sólo humanos, sino materiales para hacer su trabajo. Hoy día, los cuerpos policíacos de la capital del estado, por ejemplo, se pasean por las calles sin armamento, sin chalecos salvavidas y sin estrategia , eso ha permitido que los grupos delincuenciales con un gran poder adquisitivo les ganen la batalla a los policías y al gobierno en Cuernavaca y en Morelos.

Esperemos, pues a conocer cuál es la decisión de la próxima gobernadora del Estado de Morelos en materia de seguridad ciudadana y de qué forma juntos coadyuvamos en la reconstrucción del Morelos que nos merecemos y que hoy nos han robado y fallado en las promesas del Morelos anfitrión del mundo.

Muchas Gracias y nos leemos en la próxima.

Feliz jueves para todos.

*Padre de familia, político y soñador en busca siempre de un mejor Morelos para todos.