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Raúl Martínez Rentería*

La deshidratación es muy común en padecimientos infecciosos como diarrea y vómito, también en padecimiento no infecciosos como quemaduras o exceso de medicamentos diuréticos, así como en las altas temperaturas que están sacudiendo en algunas regiones del país durante estas últimas semanas, además de las molestias y el malestar que provocan en general, pueden traer consigo este problema, que podría pasar desapercibido en un inicio y resultar peligroso si no se combate a tiempo.

Estamos hablando de la deshidratación por calor. Esta se produce cuando el cuerpo no tiene la suficiente cantidad de agua y líquidos que necesita. La deshidratación ocasiona un normal funcionamiento de los órganos, disminuye la creación de orina y puede deteriorar rápidamente la función de algunos órganos del cuerpo lo que puede resultar muy grave si no se da solución en un tiempo adecuado, en casos extremos, el no estar bien hidratado puede provocar daño cerebral permanente, convulsiones e incluso la muerte.

Por ello es muy importante hidratarse, el agua forma parte de nuestro cuerpo, este representa el 80% del peso corporal en el recién nacido y a partir del año va disminuyendo hasta el 60% en los adultos, entre un 50 y 65% de nuestra masa corporal, no solo se encuentra en el interior de nuestras células y músculos, el agua también forma parte de nuestras articulaciones, y está presente en la mayoría de nuestros órganos.

Además de actuar como lubricante, formar saliva o regular la temperatura corporal, el agua es imprescindible para que nuestro organismo realice muchas de sus funciones.

Pero el cuerpo humano pierde líquido de forma constante. En condiciones normales, podemos llegar a perder hasta dos litros y medio por día, de los cuales medio litro se elimina con el sudor. El calor, el deporte y, en general, nuestro metabolismo y actividad nos hace perder agua por la orina y el sudor principalmente, Por lo que es muy importante reponerlo varias veces durante el día.

Aunque el primer aviso de que nos estamos deshidratando es la sensación de sed, la boca seca o pegajosa, la piel seca y fría y los calambres musculares, disminución de la orina y sudor también pueden ser síntomas de que nos estamos deshidratando, en entornos de mucho calor y exposición al sol puede acompañarse de mareo, aletargamiento, cefalea, visión borrosa e incluso la pérdida de conocimiento,

Vale más prevenir la deshidratación que curarla por lo que es importante poner mayor atención en la identificación de estos síntomas en los grupos de la población con mayor riesgo de deshidratación como son los niños, ancianos y pacientes con problemas cardiovasculares y personas con enfermedades crónicas.

La cantidad de líquido recomendada para estar bien hidratado depende de la actividad y el calor del entorno. También un entorno húmedo puede aumentar enormemente las pérdidas por sudor.

Los requerimientos de agua varían entre los individuos según las condiciones ambientales, pero debe aumentarse ante el calor, la presencia de sed, actividad física, etc.

Además de aumentar el consumo de frutas, especialmente las jugosas, se debe tener precaución de realizar ejercicio y actividades a la exposición directa al sol o, al menos, el menor tiempo posible y, por supuesto, tomar medidas de protección del sol.

Es importante no permanecer largo tiempo en el exterior de pie y resguardarse del calor ante la mínima presencia de síntomas de deshidratación.

El tratamiento de la deshidratación depende de lo grave que sea, los niños y adultos con una deshidratación leve deben tomar más líquidos en casa; los niños y adultos con una deshidratación más grave quizás deban recibir tratamiento en un servicio de urgencias médicas o un hospital

Por lo que es importante realizar una historia clínica detallada y una exploración física adecuada completa para establecer el grado de deshidratación que en que se encuentra y así poder establecer el mejor tratamiento para evitar complicaciones.

El beber una cantidad suficiente de líquidos es una de las cosas más importantes que se puede hacer para prevenir la enfermedad por calor por lo general, el agua es suficiente para la hidratación.

*Coordinador Auxiliar Médico en Salud Pública del OOAD Morelos. raul.martinezr@imss.gob.mx