I. NECESAD IRRACIONAL. – La que una y otra vez articulan quienes desde el 2018 y antes, durante más de 30 años han intentado acotar o detener el avance y consolidación de la ideología de Andrés Manuel López Obrador, quien desde que inició abiertamente su carrera en pos de la presidencia de la República puso a pensar, reflexionar y temblar a los detractores de la democracia mexicana, hurtadores de la riqueza nacional y manipuladores de las necesidades más apremiantes de los que menos han tenido durante aquellas épocas de oro en las que el salinismo y posteriormente el foxismo de la partidocracia rampante causaron el cisma de la sociedad entera y destruyeron la unidad nacionalista.
Baste consultar los indicadores, antecedentes, datos duros, históricos y determinantes que en cada uno de los 5 sexenios más obscuros de la vida en México, dan a saber sobre el yugo que representaron los gobiernos apegados a intereses extranjeros, familias privilegiadas y potentados de cuello blanco; ni qué decir del imperio que construyeron los inspiradores de narco series, corridos aterrizados en apología del delito o leyendas que retratan a los herederos del crimen, mujeres y hombres que hicieron fortuna y fama al amparo del poder público en sus 3 niveles. Así se dio la herencia maldita de corrupción e impunidad galopante, crecimiento de la criminalidad y empoderamiento del crimen organizado y no organizado. Lo anterior, sin olvidar las masacres al estilo de ajusticiamientos dirigidos, orquestados y ordenados desde los más altos niveles de la clase política corrompida en sus entrañas con costo al dolor humano de las personas de a píe e inocentes caídos en el fragor de las batallas que en ese tiempo se dieron y recrudecieron hasta quedar sin control alguno.
La desaparición de personas, el reclutamiento violento de hombres y mujeres en las filas del hampa y el abandono del sistema de estado respecto de temas de seguridad, son el marco perfecto para haber creado y cocinado un caldo de cultivo que le fue entregado como papa caliente al líder natural de la 4T; sin embargo, con las novísimas políticas para atender el referido flagelo, durante seis años se ha retomado el timón, se ha dejado demostrado en la praxis que sí se puede tener un rumbo diferente, que sí se puede transformar a la sociedad desde el ejemplo del actuar público, que sí se tienen opciones para que al interior de las familias se recuperen espacios de convivencia fraternal y solidaria que permita la recomposición del tejido social tan agraviado con las formas irracionales de hacer política como lo estilaron los neoliberales derechistas y sus compinches; esa es la gran diferencia entre aquellos y la 4T, sin que les asista la razón de manera alguna, a los vende plumas ni a corifeos jilguerillos de cantina que en sus espacios aún despotrican vs AMLO, necios, ciegos y sordos, no admiten el voto del 2 de junio que impuso la vox populi mexicana.
II. 4T CONTINUIDAD Y CAMBIOS. – Es evidente que el liderazgo de la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, tiene sus propios méritos, entre ellos sobresale el de los principios políticos que la rigen en su actuar cotidiano; es decir, la lealtad que guarda con el hacedor del proyecto de nación e impulsor del movimiento de regeneración nacional, le ha valido y le seguirá dando incentivos de reconocimiento frente al pueblo sabio que sabe distinguir entre los patriotas destacados y siempre comprometidos con la historia y los traidores a México.
En éstos momentos el tópico relacionado con una transformación de fondo en el poder judicial es de gran importancia y reviste una decisión de elevado calado, nadie hizo protesta alguna durante el decisorio presidencial de Ernesto Zedillo cuando de un plumazo ejecutó el cambio de fondo y los ministros de la Corte, pero hoy sí se han tomado el tiempo y los espacios exageradamente desbordados unos y otras, comentaristas y aplaudidores del salinato o foxismo, quienes con uñas, dientes, y lengua (menos razón), pretenden negarle al pueblo la posibilidad de que se extienda el brazo hacedor de la transformación hacía el referido poder judicial que en México y sus treinta y dos Estados, ha quebrado la legalidad, el derecho y la justicia. ¡Su Transformación es por el bien todos!
La Reforma al Poder Judicial se trata en un tiempo de cambio, de continuidad en tanto de las ideologías de un político de altura cuyas tempestades venidas desde los opositores le hicieron lo que el viento a Juárez, tan es así, que para el día de hoy se tienen los resultados de las encuestas aplicadas para saber la opinión popular en relación a las iniciativas de transformación del indicado poder judicial que nunca en su vida plagada de privilegios y canonjías, habría imaginado estar del lado de los justiciables; y es que, enjutados con sus togas, birretes y mazo, hicieron durante más de 30 años, como que trabajaban y como Dioses de la justicia, se dedicaron a venderla al mejor postor, sancionando inocentes y liberando delincuentes, de cuello blanco o negro, de la delincuencia organizada o no. En todas las materias injusticias, en la penal…total impunidad.
Así construyeron sus cloacas en que tienen convertido cada uno de los espacios que debieran servir a la sociedad, en aras de administrar justicia pronta y expedita, en un marco de respeto a los derechos humanos, de cumplimiento a los principios pro homine o pro persona, de igualdad procesal y ante la ley, de atención a los sectores vulnerables y los que menos tienen; en fin, que los horarios de trabajo de los duques, archiduques, virreyes, reinas y princesas que despachan con cargo al erario público federal o en las entidades federativas, ha llegado a su fin; un triste final para quienes pudieron trascender en la historia del país, bien merecido lo tienen y así se han quedado expuestos al escrutinio del pueblo, mismo que ha determinado que en el fondo y forma es urgente e inevitable la transformación de la vida pública gubernamental sin que existan espacios para castas, privilegiados o hampones que tuercen la ley a su favor y en su beneficio, o que han engendrado un poder judicial con nepotismo vil, ignorancia, corrupción e impunidad para sus protegidos y para sí mismos.
