La democracia es una aspiración de la sociedad moderna como forma de gobierno y en nuestro país no se ha construido de la noche a la mañana. Los incautos piensan que si hay elecciones ya tenemos democracia y solo la reducen al día de la jornada electoral. Eso nos han hecho creer los poderosos.
Muchos desmemoriados y aún militantes de los partidos políticos han dejado de lado que, como lo explica Paco Calderón, “nuestra democracia se fue construyendo mediante reformas. Cada reforma política ha sido pensada para incluir y ampliar a las minorías”. La Constitución Política de 1917 incorporó como forma de gobierno a la democracia representativa. Así surgió en 1929 el PNR, luego derivó en 1938 en PRM y 1946 en PRI, partido único, hegemónico, autoritario y que instauró el presidencialismo durante 70 años, fue todo menos democrático.
En 1963 surgieron los diputados de partido; en 1977 surgieron los diputados de representación proporcional; en 1986 se amplió la representación proporcional y se impuso límites a la mayoría; en 1990-1993 se instauró la pluralidad política para poder hacer reformas constitucionales; 1996 se impuso un límite a la sobre representación política con un 8 % y se creó el TRIFE; 2012 se establecieron las candidaturas independientes; y en 2014 se creó el INE y se estableció la paridad de género; y hoy 2024 con los resultados de la elección vuelve a surgir un partido-movimiento hegemónico, Morena, con tintes autoritarios y que se quiere agandallar la sobrerrepresentación política con el 16 %, totalmente anticonstitucional y antidemocrática.
De 1977 a antes del 2 de junio de 2024 vimos crecer la ilusión democrática y como las minorías opositoras transitaban a paso firme con reformas políticas para consolidar una democracia liberal constitucional, la cual en el año 2000 se concretó con la alternancia en el poder como si fuera un sueño convertido en realidad, pero ahora se cierne sobre nuestro país el fantasma del desencanto democrático y esas minorías opositoras se han convertido en mayorías que anhelan volver al partido único olvidando la aspiración democrática de los mexicanos..
