Toda expresión cultural tiene como condición la propia vida, y en Jiutepec, como en otras localidades, está en riesgo no sólo por la inseguridad rampante, sino por prácticas silenciadas de tratamiento de basuras y residuos sólidos y líquidos, como en el caso del basurero ilegal de Tezontepec, donde operó la extracción de Tezontle por 50 años, y ha funcionado los últimos 25 como tiradero.
Es el caso que, desde el 1 de abril de 2023, vecinas y vecinos de ese basurero clandestino, denunciamos el grave incendio y sus orígenes, ante las autoridades federales, estatales y municipales, exigiendo ordenar un estudio científico que diera cuenta de la peligrosidad de las emisiones que, desde entonces, sin parar, surgen desde ahí.
SEMARNAT finalmente solicitó tal estudio al Instituto Nacional de Ecología y Cambio Climático, a principios de 2024, y hace por lo menos 3 semanas lo tiene el Ayuntamiento y no lo ha publicado. Vecinos organizados solicitamos una copia del mismo hace 3 semanas, lo obtuvimos vía la Plataforma Nacional de Transparencia y ya lo publicamos, porque es un derecho ciudadano saber sobre daños pasados, actuales y potenciales a su salud.
Las conclusiones de dicho estudio confirman, oficialmente, lo que la ciudadanía ha sentido en sus pulmones y sistema digestivo y lo que el monitoreo solidario REDSPIRA nos ha aportado, así como un estudio de la UNAM realizado hace ya un año: que los gases y partículas sólidas emitidas, rebasan los niveles máximos determinados por normas mexicanas y de la OMS. Son venenosas esas emisiones, algunas cancerígenas y mortales. ¿Por qué impedir, no informando, nuestro derecho a la salud, teniendo las pruebas de la peligrosidad, pasada, actual y futura de las emisiones del basurero clandestino?
Dicho estudio menciona que: “El sitio de mayor abundancia de COVS totales fue el S1 con 391 μg/m3, seguido del S4 con 345 μg/m3 y al final S3 con 251 μg/m3. De los 92 COVS, los 15 de mayor concentración sumada fueron propano, etilbenceno, n-butano, tolueno, isopentano, estireno, MTBE, isopropilbenceno, n–pentano, isobutano, benceno, etano, 2- metilpentano, n-hexano, cloruro de metileno, p–xileno, etileno, propileno, 2,2,4- trimetilpentano y acetileno, que representaron el 88, 79 y 77% del total de COVS de los sitios S1, S3 y S4, respectivamente”. Venenos puros, algunos de mayor peligrosidad, algunos mortales, según refieren instituciones de salud, nacionales y del extranjero”, y continúa: “El benceno en particular, es importante señalar que rebasa el criterio de salud de la Organización Mundial de la Salud, de 5 μg/m3 solo en el sitio 1”, esto es, al norte del basurero ilegal.
Pero hay más. En los tres sitios en que se buscaron metales entre las emisiones, se encontraron “concentraciones del grupo uno (S, K, Si, Ca, Al, Zn y Fe) son un orden de magnitud mayor a las concentraciones del grupo dos (Ti, Cu, Ni, Pb, Mn, Vy Cr). En todas las muestras colectadas el elemento más abundante fue el azufre”.
El partido Morena perdió las elecciones para la presidencia municipal, en gran parte por ser omisas las autoridades emanadas de él respecto a este tema por varias administraciones, y por permitir la operación del basurero clandestino, causa principal de las enfermedades de un número indeterminado de personas, lo sabremos pronto cuántas y pueden ser también de Cuernavaca y E. Zapata.
¡Que no les pase esto a otros!
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