Con una carrera de 5 y 10 kilómetros, en la que participaron decenas de ciudadanos, autoridades del gobierno de Cuernavaca buscan crear conciencia en el cuidado y prevención del dengue, padecimiento, cuyos casos han ido en aumento durante las últimas semanas.
Josué Larios, director de Salud y Educación en la capital refirió que, el objetivo de la carrera es “para evidenciar que sí tenemos un problema por el aumento en los casos, pero también verlo como una oportunidad para fomentar buenos hábitos que derivan en el cuidado de la salud; es un momento de también convertir un problema de salud en algo positivo y, tal es el caso de esta carrera, queremos que los ciudadanos comprendan que ejercitándose pueden prevenir varias enfermedades”, explicó.
En Cuernavaca, suman más de 300 casos sospechoso del padecimiento, situación que ha “encendido las alarmas”, pues refiere un aumento importante en comparación con años anteriores.
De acuerdo con especialistas, en 2024 los casos de enfermedades transmitidos por vector se han incrementado un 200 por ciento; de ello deriva la preocupación e insistencia de la adopción de medidas de protección.
A principios del mes de julio, la Dirección General de Salud, perteneciente a la Secretaría de Desarrollo Humano y Participación Social y la Secretaría de Desarrollo Sustentable y Servicios Públicos, ambos del Ayuntamiento de Cuernavaca anunciaron una serie de medidas preventivas que incluyen: termonebulización, jornadas de descacharización, campañas de colocación de abate en depósitos de agua, de socialización de los síntomas de dengue y concientización LAVA-TAPA-VOLTEA.
Estas acciones se han concentrado en la colonias Satélite, Villa Santiago, Ahuatepec, Revolución, Lomas de Cortés, Chamilpa, Flores Magón, Lagunilla y Ocotepec, que son las que han registrado mayor cantidad de casos sospechosos de dengue. sin embargo no se descartaron labores en colonias aledañas.
Las recomendaciones para los ciudadanos también son que apliquen medidas como mantener limpios patios y azoteas; eliminar cacharros y sobre todo cualquier recipiente que acumule agua, puesto que éstos se convierten en criaderos del mosco de dengue.
