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Saberse derrotado en las urnas e intentar revertirlo lleva al engaño, la violencia y la corrupción

 

Inicio con una frase del Che Guevara: “No soy un libertador, los libertadores no existen. Son los pueblos quienes se liberan a sí mismos”, frase cuyo valor no sólo está en el contenido de la frase sino en el profundo compromiso, de quien la pronunció, con la lucha de los pueblos latinoamericanos para construir un mundo más justo y digno para todos.

Hoy en día la palabra “pueblo” está en boca de muchas y muchos políticos y frecuentemente es utilizada en narrativas para encubrir acciones que están dirigidas al beneficio personal o de grupo, son políticos que están muy lejos de tener un compromiso con el pueblo que tanto nombran. Para sustentar lo que aquí afirmo y justificar el subtítulo de este escrito presentaré el análisis de dos casos: las acciones realizadas por la candidata a la gubernatura postulada por la Coalición PRI-PAN-PRD-RSP en contra de los resultados presentados y validados por el IMPEPAC; y la elección a la diputación del Distrito Local VIII con cabecera en Xochitepec.

  1. El Engaño.

En un video [1] difundido por redes sociales en los últimos días, Lucía Meza, candidata que obtuvo el segundo lugar en la elección a la gubernatura, expresa: “… estamos dando la cara con dignidad y con la frente en alto para decirles que estamos defendiendo el voto popular y luchando en contra del gran fraude electoral, la nulidad de la elección de la gubernatura vendrá a fortalecer nuestra democracia.” En este video la candidata afirma que “en Morelos está comprobado el fraude” e informa que han promovido recursos de impugnación tanto en el ámbito electoral como en el penal [2] y señala las pruebas que supuestamente demuestran dicho fraude y que considero es un engaño a la sociedad morelense como analizo a continuación.

Lucía Meza sabe, estimo, que está consciente de su derrota en las urnas y de la importante diferencia existente entre la votación obtenida por Margarita Saravia (460,271) y la obtenida por ella (294,292), diferencia que asciende a 165,979 votos. Sabe que las pruebas que presenta son endebles y engañosas, sin embargo, intenta revertir los resultados mediante argucias legales. Lucía no puede engañarse a sí misma, pero pretende engañar al pueblo que dice defender.

Las pruebas que presentan son:

  • La adquisición irregular de 146,992 boletas para la elección de la gubernatura que no fueron aprobadas por el IMPEPAC y se ignora su paradero. Lucía Meza engaña porque sabe que la adquisición de esas boletas es legal y tiene una razón de ser como ya explicó públicamente la Consejera Presidenta del IMPEPAC: En enero de 2024 el IMPEPAC firmó el contrato con la empresa Litoformas para la producción de la documentación y materiales electorales, entre ellos las boletas. En ese momento el INE no había hecho el corte final de la Lista Nominal y no se habían definido las casillas especiales por lo que se desconocía el número total final de electores. Es hasta abril que se hace el corte después de una campaña intensa del INE para la credencialización y se definen 30 casillas especiales que requieren mil boletas cada una. El IMPEPAC, con base en el contrato firmado, solicita a la empresa las boletas adicionales que se requieren. Lucía conoce el paradero de las boletas que son las casillas donde cada ciudadano y ciudadana morelense tenía asegurada la boleta para emitir su voto.
  • Extravío de 111 paquetes electorales y violación en su cadena de custodia. Lucia Meza sabe que esos 111 paquetes electorales [3] corresponden a la elección del Ayuntamiento de Cuernavaca y NO a le elección de la gubernatura para la cual se recibieron todos los paquetes electorales. ¿Por qué engaña?
  • Grave diferencia de 38,192 votos entre la elección presidencial y la de la gubernatura de Morelos. Nuevamente Lucía Meza engaña, ella sabe que basó su cálculo en un dato inadecuado, en la votación de los electores de Morelos en la elección presidencial reportada al cierre del PREP Nacional, que para Morelos sólo contabilizó el 92.72% de las actas esperadas, reportando 911,355 votos. Lucía, al parecer, compara este dato con la votación emitida en la totalidad de las casillas contabilizadas en la elección para la gubernatura que fue de 951,585, resultando una diferencia de 40,230 votos, que seguramente están en las 30 casillas especiales y en las 188 casillas que el PREP nacional NO contabilizó. Los datos finales de la elección a la Presidencia aún no se dan a conocer dado que es el Tribunal Electoral Federal el que hará el cómputo final.
  • Graves irregularidades en 2,434 casillas, como ejemplo se mencionan las siguientes: Integración de mesas directivas de casilla con personas ajenas a la sección electoral; evidentes discrepancias aritméticas; y urnas donde se emitieron más votos que el número de personas inscritas en las listas nominales. Lucía Meza cuestiona el 94.15% de las casillas [4], pero no menciona cuales casillas tienen qué irregularidades, por lo menos pudiera señalar algunas de ellas donde las irregularidades hayan sido más graves y así tener la posibilidad de investigar la veracidad de lo dicho. Lucía Meza muy probablemente con conocimiento y consciencia de lo que está afirmando, sabe que dos de las tres irregularidades citadas NO son causales de nulidad de una elección, sabe que el INE es el responsable de la integración de las mesas de casilla y que cuando el día de la Jornada Electoral no se presenta algún funcionario y ya no hay suplentes se toman ciudadanos de la fila que pertenezcan a la sección. También sabe que las discrepancias o errores aritméticos se corrigen durante el cómputo distrital. Por último, resulta increíble sostener que hay urnas -no dice cuáles ni cuantas- donde el número de votos sobrepasa al número de electores inscritos en la lista nominal, esto puede ser un error en el acta de escrutinio y cómputo lo que debió corregirse con el recuento del paquete electoral o bien significa que en esas casillas todas las boletas habrían sido utilizadas y además se habrían añadido otras boletas provenientes de algún otro lugar. Si esto último realmente ocurrió y Lucía Meza puede demostrarlo, respetuosamente le solicito dé a conocer las secciones y casillas donde estos hechos ocurrieron, la sociedad morelense tiene derecho a saberlo, si no es así, yo esperaría una disculpa pública de su parte.
  1. La Violencia

Los hechos violentos ocurridos durante la Jornada Electoral en el Municipio de Coatlán del Río que llevaron a los funcionarios de casilla y personal de apoyo del INE y del IMPEPAC, responsables de varias casillas, a abandonar los paquetes electorales para salvaguardar su seguridad personal, están descritos en un artículo anterior publicado el 1º de julio de este año en este diario. Asimismo, están descritos los hechos violentos ocurridos el 4 de junio y durante el desarrollo del proceso de cómputo distrital en las instalaciones del Consejo Distrital 8 en Xochitepec. En mi consideración estos acontecimientos pudieran tener relación con el conocimiento que el candidato a diputado del PT podría tener sobre las preferencias electorales de la población de ese distrito que no le favorecían y que se evidenciaron el 3 de junio en los resultados del PREP para la elección citada: con el 55.8 % de actas contabilizadas se colocaba en primer lugar a la candidata de la Coalición Morena-PNA-PES-MAS. La no aceptación de la posible derrota electoral lleva a realizar acciones para revertir la decisión de la ciudadanía mediante la manipulación del cómputo distrital a través de acciones violentas como las realizadas el 4 de junio, amenazas o intimidaciones para obtener el control de las y los consejeros electorales, representantes de partidos políticos y personal de apoyo de éstos. El candidato del PT logró lo que se proponía, pero tendrá que confirmar su “triunfo” en los tribunales.

  1. La corrupción

En ambos casos las candidaturas no cuentan con la preferencia de la población y pretenden revertir la decisión de la ciudadanía mediante el engaño o la violencia, necesariamente tienen que recurrir a los tribunales electorales. En el primer caso la pretensión es que el Tribunal anule la elección de la gubernatura; en el segundo caso se pretende que los tribunales no atiendan los reclamos de las personas o partidos políticos que impugnen [5] el “triunfo” del candidato del PT. Ambas candidaturas saben que no tienen las evidencias y los elementos jurídicos para lograr lo que pretenden, entonces ¿por qué lo hacen? ¿se propone conseguir un fallo a su favor cueste lo que cueste?

[1] El video puede verse en: https://x.com/LucyMezaGzm/status/1815432097437507832?ref_src=twsrc%5Egoogle%7Ctwcamp%5Eserp%7Ctwgr%5Etweet

[2] En la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales.

[3]La Presidenta del IMPEPAC explicó públicamente que esos 111 paquetes fueron colocados en las cajas que correspondían a la gubernatura, por la ciudadanía que participó en las mesas de casilla de Cuernavaca. Cuando se realizó el cómputo de la elección de gubernatura se encontraron dichos paquetes y fueron entregados al consejo municipal correspondiente.

[4] En Morelos se instalaron 2,585 casillas en total.

[5] Personas indígenas pertenecientes a comunidades ubicadas en el Distrito 8 impugnaron los resultados de la elección, la Magistrada titular de la Ponencia Tres confirmó el “triunfo” del candidato del PT y declaró inoperantes.

*Académica y Expresidenta del Impepac (2014-2020)