La boxeadora italiana Angela Carini abandonó su pelea de octavos de final de 66 kilos tras recibir un fuerte golpe en el rostro que le fracturó la nariz, y su contrincante la argelina Imane Khelif regresó al centro de la polémica.
Por causa de Khelief y de la boxeadora de Taiwán, Lin Yu-ting, el Comité Olímpico Internacional emitió ayer un comunicado en el que informó que no se podían cambiar las reglas de la competencia cuando éstas ya están en juego ya que ambas deportistas nacieron siendo varones.
La comunicación del COI descartó tomar medida alguna en contra de ellas pues cumplen los requerimientos para estar en la justa, a pesar de que en 2023 se determinó que no habían pasado las pruebas de elegibilidad de género en los campeonatos mundiales. Khelief fue excluida de la final del Mundial por sus altos niveles de testosterona.
Imane Khelif de Argelia, que disputó su segunda justa veraniega en su carrera, pero Lin Yu-ting de Taiwán, dos veces campeón mundial. «Todos los que participan en la categoría femenina cumplen con las reglas de elegibilidad de la competencia. En sus pasaportes aparecen mujeres y así lo indica, que son mujeres «, dijo el portavoz del COI, Mark Adams.
Fue la ministra italiana Eugenia Roccella lamentó que no existan » criterios ciertos, estrictos y uniformes internacionales, y que precisamente en los Olímpicos, un acontecimiento que simboliza la equidad deportiva se pueda sospechar una competencia desigual e incluso potencialmente arriesgada para uno de los contendientes», dijo.
Lin Yu-ting es la cabeza de serie en la categoría de peso pluma (57 kgs.), quien abrirá su participación el 2 de agosto ante la uzbeka, Turdibekova Sitora.
