Como ya comentamos anteriormente, la pugna por la candidatura de Morena a la gubernatura del estado -o como eufemísticamente le llaman para no trasgredir la ley electoral: Coordinador (a) de la Defensa de la Cuarta Transformación- será de pronóstico reservado.
Por la situación que impera en nuestro estado, algunos pensaban que Morelos no le importaba a nadie, ni siquiera a los que están en las postrimerías de sus cargos y funciones públicas. Afortunadamente no es así, y varias personalidades de primer nivel, ya desde hace algunos meses, han comenzado a levantar la mano para que los anoten en la lista de aspirantes, tanto en el partido mayoritario como en la llamada oposición.
A las filas de aspirantes se suma la economista Brenda Espinoza López, actual diputada federal de mayoría relativa por el cuarto distrito, de quien publicamos una entrevista hoy.
Como todos los aspirantes a la candidatura, la diputada Espinoza López es consciente de los problemas actuales que se viven en la entidad: inseguridad, feminicidios, contracción del mercado laboral y corrupción, solo por mencionar algunos, y sus soluciones son diversas: fomento de actividades productivas, rescate al campo, apoyo a los jóvenes para que no caigan en las redes del crimen organizado, continuar atacando las causas que favorecen la prosperidad de la criminalidad y combate frontal a cualquier acto de deshonestidad en la administración pública, son algunas de ellas.
No obstante, es interesante su perspectiva: convocar a la ciudadanía y dialogar con todas las fuerzas políticas para que, junto con los gobiernos estatal y municipales se conforme una causa común por amor a Morelos.
Su optimismo se basa no solo en su juventud, sino en su experiencia como legisladora federal, labor en la que, en repetidas ocasiones, ha tenido que sentarse a negociar con representantes de diversos intereses y posturas políticas.
Reconoce que difícilmente se va a lograr algo si no es mediante la coordinación de las distintas fuerzas por una meta en común porque, dice, en la entidad ya ha habido demasiados desencuentros y, para avanzar hacia las soluciones que tanto nos hacen falta, es necesaria una mesa de diálogo “donde se despojen de sus camisetas, se despojen de sus propios intereses y que sinceramente caminen en la ruta de un mejor Morelos”.
Para eso está dispuesta a conversar con todas las fuerzas políticas, poderes de gobierno y grupos sociales para empezar por una reconciliación social en el estado: “tenemos que conciliar. Tenemos que dialogar”, afirma.
Como lo hemos podido comprobar de primera mano, todos los aspirantes a la candidatura le tienen bien tomada la temperatura a Morelos y tienen propuestas que suenan razonables y, si de algo puede servir este proceso de pre pre candidaturas es que, los que no resulten designados por sus fuerzas políticas donen generosamente sus ideas y que con todas ellas se conforme el que podría ser el mejor plan de gobierno que esta entidad ha visto en décadas y, después, que ellos y todos ayudemos a hacerlo realidad.
También, esperemos que el desgaste de este ejercicio electoral tan anticipado -o “inédito”, como le llaman algunos- no encone aún más las posiciones y que, al final del día, tengamos una situación como la que tanto critica la diputada Espinoza: una división estéril, inútil para atender el cúmulo de urgencias que ya tiene Morelos.
