La partida de José Agustín propició ríos de tinta, que con justicia cuentan la trayectoria y singular personalidad de un actor fundamental en las letras mexicanas de la segunda mitad del siglo XX. Se integró a la extensa relación de escritores que han hecho de Morelos su terruño. Sintió predilección por nuestra geografía y fuimos muchos los que disfrutamos su prosa cargada de humor en “La panza del Tepozteco”.
Cuautla fue su hogar desde hace más de 50 años, ha circulado en estos días, una magnifica reseña que hizo de la localidad. Ahí dio cuenta de las bondades del clima y naturaleza del lugar, de la anarquía urbana que afeó su traza urbana, así como del carácter forjado en la memoria que deriva del Sitio de Cuautla y el Zapatismo. Sin proponérselo José Agustín pavimentó un camino que lo llevó a ser en vida, pero sobre todo hoy, un orgulloso referente de la robusta identidad cultural morelense.
Roberto Abe Camil
