Agua ¿continuidad o cambio?
No tengo la menor duda. En Morelos urge un cambio. Hay que salir a votar por él.
Ayer vi el video de Eugenio Derbez donde invita a los jóvenes a votar. Después me enteré de que ha recibido multitud de ataques y amenazas en redes sociales o fuera de ellas. No podemos permitirlo. No puede ser.
“Yo te pregunto a ti joven y a ti mexicano en general ¿estás feliz con el México en el que vives? ¿estás conforme? ¿estás a gusto con los niveles de violencia, inseguridad, pobreza, desigualdad? ¿estás harto de la corrupción? ¿de tener que pagar derecho de piso? ¿de la impunidad? ¿de saber que la ley no te defiende? ¿del desabasto de medicinas? ¿de no tener un sistema de salud decente? ¿de la escasez de agua, de los apagones?”
“Tal vez estás a gusto con el país que tenemos y estás genuinamente conforme con los pequeños apoyos que te da el gobierno y tal vez no quieres que las cosas cambien; en cualquiera de los dos escenarios, ya sea que quieras que el país siga igual o ya sea que quieras que el país cambie, por lo que más quieras… vota”.
¿Y por qué las legiones de bots han salido a amenazarlo y a atacarlo tan ferozmente? Porque dice lo que muchos de nosotros pensamos: “todos los partidos nos han fallado, nos han robado, nos han engañado”. Pero no por eso vamos a dejar de ejercer nuestro derecho a decidir. Tenemos que salir a votar.
El gobierno de Morena ha tenido en Morelos a su peor representante, el gobernador Cuauhtémoc Blanco y sus secuaces. No han hecho una sola obra que se recuerde con los más de 180 mil millones de pesos de presupuesto que han recibido en 6 años. Lo reto a que me diga una sola.
Y el gobernador tendrá fuero, al menos así lo está buscando con su candidatura a una diputación federal, pero sus secuaces no. El problema está en que sólo serán investigados si hay un cambio en el gobierno, si son los mismos los van a cubrir con el manto protector de la impunidad.
En Morelos urge cambiar al partido en el gobierno.
Necesitamos gente competente en los cargos públicos, especialmente en temas tan sensibles como el agua, necesitamos que la gente encargada de atender esos asuntos sea gente profesional y con experiencia, que pueda desarrollar soluciones y políticas públicas innovadoras basadas en la ciencia, en evidencia y datos sólidos, pero además que sea totalmente transparente y cuente con credibilidad. No estamos para encargar el tema a gente ignorante o corrupta. Por eso, con toda claridad lo digo, en Cuernavaca también urge un cambio. Hay que poner a los profesionales de cada sector al frente.
Los profesionales tienen habilidades técnicas y conocimientos especializados en sus áreas de trabajo. Al ubicarlos en el servicio público, se aprovecha su experiencia para abordar los desafíos y desarrollar soluciones efectivas, no solo en el agua, sino también en otros campos, como la salud, la educación y la agricultura.
Los profesionales están bien capacitados para realizar sus tareas de manera eficiente y efectiva. Su presencia en el servicio público contribuye a mejorar la eficiencia operativa y la calidad de los servicios que se brindan a la ciudadanía.
Los profesionales están al tanto de las últimas investigaciones, tecnologías y mejores prácticas en sus campos respectivos. Al incorporarlos al servicio público, se fomenta la innovación y la adopción de nuevas ideas para mejorar los servicios y procesos gubernamentales.
Los profesionales están sujetos a estándares éticos y de conducta en sus respectivas profesiones. Su participación en el servicio público ayuda a promover la transparencia y la rendición de cuentas en la toma de decisiones.
La presencia de profesionales en el servicio público puede aumentar la credibilidad y la confianza del público en las instituciones gubernamentales. Esto es especialmente importante en contextos como el que vivimos hoy, donde hay una percepción de corrupción e incompetencia en el sector público.
Finalmente, los profesionales basan sus decisiones en evidencia y datos sólidos. Al ubicarlos en el servicio público, se garantiza el desarrollo de políticas y programas basados en evidencia científica y análisis rigurosos, no en ocurrencias, improvisaciones o negocios.
*Profesor, consultor y gerente general de AQUATOR
