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Omar Said Olibares Hernández*

En los últimos días se han suscitado una serie de actos violentos en la entidad, de los más recientes, fueron los ocurridos en el municipio de Huitzilac donde al menos ocho personas fueron privadas de la vida, que no sólo refleja el alto índice de violencia en la zona norte de Morelos, sino que el entorno de niñas, niños y adolescentes (NNA), está marcado por la inseguridad.

¿No cree que este tipo de hechos ha ocasionado normalizar la violencia?, es decir, la disputa entre grupos criminales provoca el pensamiento “sino es mi familiar la persona que acaban de ejecutar, no me afecta”, a pesar de que eso incide directamente en la percepción de inseguridad, que nuevamente afecta a las infancias y a las adolescencias.

En el caso de Huitzilac por ejemplo, provocó que las autoridades educativas, tomaran la decisión de suspender actividades en catorce escuelas de nivel básico, según lo informado por el Instituto de Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM).

Esa decisión, restringirá las actividades de NNA, no sólo en el hecho de que no asistan a la escuela, sino su estancia en casa, la falta de contacto social con sus compañeros de clase, con los maestros, incluso la libertad para acudir a sitios públicos de recreación, incluso pueden percibir su escuela o su comunidad como un lugar inseguro, que va a generar alteraciones en su comportamiento y miedo.

La Convención de los Derechos del Niño (CDN),establece en su artículo tercero que, “los Estados Parte se comprometen a asegurar al niño la protección y el cuidado que sean necesarios para su bienestar” y el artículo tercero de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, establece que toda persona tiene derecho a la educación.

Mientras que la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (LGDNNA) en su artículo 13, señala, entre otros, el derecho al desarrollo, a una vida libre de violencia, a la educación, al descanso y al esparcimiento, derechos que no se completan ante una situación como la anterior.

Entonces, ¿qué pasa si después de que acontece un hecho violento, se toma la decisión de cerrar las escuelas?, ¿cómo le explicamos a un NNA que el Estado no puede garantizarle ese y todos sus derechos? porque sí, todos los derechos van conectados uno con el otro, y al violentar uno, evidentemente se violentan todos los demás, lo que entorpece que puedan desarrollarse plenamente, y que las condiciones para vivir sean bajo la intimidación, sin generar un proyecto de vida.

Es aquí, donde el Estado tiene una alta responsabilidad de garantizar condiciones de seguridad, paz y tranquilidad en donde puedan desarrollarse libre de cualquier tipo de violencia, no sólo en la infligida en lo individual, sino lo que los rodea, como lo indica el mandato constitucional de que todo asunto relacionado con NNA es de naturaleza primordial, y las decisiones que tomen deben analizarse.

*Juez de Control, Enjuiciamiento y Ejecución de Sanciones del Tribunal Unitario de Justicia Penal para Adolescentes.