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Hace unos días descubrí a Dámaris Bójor, una cantante y compositora sonorense cuyo público la ha situado en el “Folkpirano”, una mezcla de la música campirana de la Sierra con el Folk de Estados Unidos. Aunque lleva unos años tocando y componiendo, apenas en 2022 lanzó su primera canción a plataformas digitales y lleva poco más de un año dando a conocer su música con una proyección sorprendente.

 

He identificado en la música de mujeres latinoamericanas un vínculo constante con la naturaleza, lo cotidiano y lo simple, como una búsqueda de regreso a la calma, contra la exigencia multitask y apresurada de la posmodernidad, y es inspirador encontrar, dentro del género regional mexicano, narrativas que rompen con la apología de la violencia o la glorificación del narco.

“Siento que el género regional necesita más voces e historias diversas para ser contadas, más allá del amor estereotipado y romántico, del gusto por los objetos materiales, las fiestas y los excesos” comparte ella en su Bio de Spotify.

Ella quería tocar como Miguel y Miguel, una agrupación de regional mexicano también originaria de Sonora, pero alguien le dijo que lo que ella tocaba era Folk, y para un concierto que se aproximaba convocó, a través de Instagram, a un requintista. Fue así que inició su camino de complicidad musical con Alex Anguiano, construyendo una sonoridad Folkpirana.

Dámaris siempre quiso componer un corrido a su tierra natal, y en 2022 lanzó “Sonora”:

“Yo no quiero dejar mi pueblito,

Yo no quiero dejar mi ciudad,

Para que ir persiguiendo espejismos,

De falacias de prosperidad”

Una de mis canciones favoritas es “Yécora”, inspirada en una localidad ubicada en el oriente del estado de Sonora, en la región de la sierra, lugar que la inspira a componer canciones.

“Traté de refugiarme en un vicio o dos,

pero eso no es la cura para el corazón,

y para ya no causarles más complicaciones,

mi remedio fue irme al bosque a escribir canciones

a Yécora”.

Recientemente lanzó “Volar”, una colaboración con Juan Cirerol, cantante y compositor de Mexicali, Baja California, quien, por cierto, hace un mes visitó tierras Guayabas. La canción está inspirada en el concepto de “La luz es como el agua”, uno de los “Doce cuentos peregrinos” de Gabriel García Márquez.

El proyecto también está integrado por Kevin Braun, Luis Salido, Allam Jaime y Chino Marcial.

“Yo quiero contar eso que conecta con emociones profundas e historias de gente de carne y hueso, tocar el alma y darte un abrazo al corazón”

*Cancionista y comunicadora

Imagen: Viverate.com