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Alejandro Guzman*

El Pinocho de Guillermo del Toro es para muchos una de las obras fundamentales en la carrera del realizador. Y no es para menos, basta con revisar los 15 años de trabajo detrás, desde el meticuloso diseño de los personajes así como algunas innovaciones en el campo de la animación (recomiendo ampliamente Pinocho de Guillermo del Toro: Cine tallado a mano, también en Netflix). Quizás el más loable de todos estos esfuerzos sea la intención de devolver ala fábula su carácter oscuro y hóstil; y sí, el Pinocho de Guillermo del Toro, aunque algunos les cueste, está dirigida a un público de amplio criterio, y plasma unas cuantasmoralejas muy ad hoc a los tiempos de cancelación: la relación padre e hijo basada en la comprensión, el fascismo,la mortalidad y las virtudes de la desobediencia. Sin embargo es justo en este abanico temático donde la película se desbarata. Que esté ambientada en la Italia fascista me parece uno sus más grandes aciertos, al igual que la muerte del hijo primigenio, Carlo, como detonante del origen del títere. El problema está en que, en lugar de que esto sea planteado como como contexto, se plantea como centro. Y desgasta. Hacer una canción sobre las similitudes entre elfascismo y un pedazo de popó, es un lugar común. ¡Hey! Ni siquiera me parece transgresor o gracioso, todos sabemos quiénes son los malos de la historia, Hollywood se ha encargado de restregárnoslo con cientos de películasoficiales. A estas alturas de la posverdad, hay algo que siguesintiéndose forzado, y un tanto mainstrain, algo así como loque hace Almodóvar con los desaparecidos de la Guerra Civil Española en Madres Paralelas (2021), una película donde dos mujeres muy distintas entre sí, dan a luz en la misma fecha en el mismo hospital. Ambas, a pesar de su diferencia, viven bajo un mismo sistema. Las circunstanias y dinámicas a las que ellas se enfrentan tienen que nombrarse, pero resulta a la postre predecible, porque Almodovar no complejiza, sino que simplemente cumple. Quizás sucede algo similar en el Pinocho de Guillermo del Toro, cuyos pilares narrativos parecen ser, a veces, primordialmente los morales, los correctos. Una vez establecidos los pilares, se desenvuelve el filme, y la película es todo lo que sucede en medio de estos pilares. El problema es que la película también está limitada por ellos, puesto que en no pocas ocasiones terminan teniendo más peso que la historia misma. Lo que quiero decir es que si vamos a explorar esos lugares,si vamos a hacer moralejas, hace falta ir un poco más al fondo, plantear nuevas preguntas, cuestionar lo incuestionable.

Lo que sí sorprende y da para otro tipo de reflexión es lo que ha pasado alrededor de su estreno. Llama la atención cómo un director de la talla de Guillermo, muy querido y respetadopor la comunidad cinematográfica nacional e internacional,ganador del Oscar y campeón de las causas perdidas, tiene mover mar y tierra para que su trabajo sea visto en salas. Después de una aparente traición de parte del grupo Cinemex, Del Toro y amigues lanzan una campaña en redespara animar a exhibidores a competir con esa cinemateca de ordenador, socio, aliado y enemigo al mismo tiempo,llamado Netflix.

Con todo esto no puedo evitar pensar en la escena donde el Conde Volpe amedentra a Pinocho con un bastón y dice: ¡Si bien eres la estrella, yo sigo siendo el titiritero y tú la marioneta! Si eso le pasa a Del Toro, Estrada, Cuarón eIñarritu, imagínense al resto de los muñecos que conforman el Cine Nacional.

De cualquier forma, el Pinocho de Guillermo del Toro es también una película que congrega en sus acabados, en el su estilo, un mundo retórico muy propio, el del Toro. Los gestos cinematográficos, los acentos y el ritmo son indudablemente una marca de la casa, un sello propio. Y más allá de la narrativa, que por lo que dije anteriormente puede estar sometida a la época actual, se trata de un filme fundamental.

* Alejandro Guzmán es cineasta, dirigió los largometrajes Distancias cortas (2015) y Estanislao(2020). Emiliano Becerril Silva lo invita a discurrir sobre Pinocho, una de la spelículas del momento.

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