loader image

 

Ni cultura, ni desarrollo económico, ni boom turístico. Los precarios resultados están a vista, Morelos enfrenta el mayor rezago cultural de su historia reciente. Con datos cuantitativos y cualitativos, las instituciones culturales estatales, sin cabezas titulares algunos de ellos, sin presencia territorial en los municipios, y un sector cultural precarizado de acuerdo a datos preliminares de los 5 foros de consulta que Cultura 33+3 recientemente realizó en los municipios de Coatlán del Río, en Cuautla, en Xoxocotla, Yautepec y Quebrantadero en Axochiapan.

No sabíamos, en Morelos, por lo menos no a través de información pública de carácter técnico (censos, inventarios, informes, diagnósticos), el estatus que guarda la infraestructura cultural estatal (museos, galerías, plazas de arte, casas de cultura, teatros, cines, bibliotecas, y centros culturales independientes, etc.), ni mucho menos del estado real en que se encuentra el patrimonio cultural material e inmaterial a casi seis años del sismo de 2017, de los efectos que ha producido la violencia del narcotráfico y la post pandemia, pero sobre todo, acerca de la precarización de las más de quince mil personas dedicadas a la creación y a la promoción cultural.

Aquí una propuesta emergente a la luz de los resultados que pronto daremos a conocer:

1.- Que el Ejecutivo estatal, a través la nueva institución cultural, las secretarías de Hacienda, Economía, Desarrollo Social, Desarrollo Sustentable, entre otras, diseñe un Fondo para el Desarrollo Cultural Estatal, intermunicipal, que invierta recursos equitativos para el desarrollo cultural sostenible de las comunidades, contribuyendo a la descentralización de los bienes y servicio culturales, más allá de las demarcaciones territoriales político-administrativas, a través de mecanismos de financiamiento en donde los ayuntamientos coadyuven y asuman su corresponsabilidad para dicho propósito. Se trata de impulsar un modelo de municipalismo y cooperación cultural.

2.- Que el otorgamiento de dichos recursos corresponda a diagnósticos y necesidades culturales emanados de las propias comunidades, acorde a las leyes estatales de planeación, de participación ciudadana, y de Cultura, con el acompañamiento de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, de acuerdo a lo establecido en la Ley de Cultura y Derechos Culturales para el Estado de Morelos, validados mediante órganos colegiados o instancias de participación ciudadana, para erradicar prácticas autoritarias que obedecen al escritorio e ignoran al territorio.

Margarita González Saravia ha reconocido que el trabajo de Cultura 33+3, y la Ley de Cultura y Derechos Culturales para el Estado de Morelos es un piso para el diseño del próximo proyecto cultural de Estado y sus políticas públicas. Así lo afirmó en su encuentro como candidata con integrantes de ese colectivo con el que firmó diez compromisos que a continuación recupero:

  1. Consultar ampliamente a la población en general, y al sector cultural en particular, para la elaboración del Programa Sectorial de Cultura 2024-2030, desde un enfoque intercultural, interseccional, con perspectiva de derechos humanos y de género, para la erradicación de las violencias y la construcción de una cultura de paz.
  2. Aplicación garante y progresiva de la Ley de Cultura y Derechos Culturales para el Estado de Morelos.
  3. Rediseño de la máxima institución cultural para que asuma su responsabilidad articuladora como cabeza de sector, desde la sustentabilidad y la sostenibilidad.
  4. Garantizar los derechos laborales de los y las trabajadoras de la cultura.
  5. Fortalecer la educación artística en todos los niveles.
  6. Descentralización de recursos, bienes y servicios culturales para promover la cultura comunitaria.
  7. Preservación, investigación y difusión del patrimonio biocultural, material e inmaterial.
  8. Fomento a las micro y pequeñas empresas culturales.
  9. Atención a niñas, niños y adolescentes.
  10. Difusión y divulgación descentralizada de las artes, artistas y grupos que habitan en el Estado.

Margarita González Saravia será la primera mujer gobernadora. Hay una gran oportunidad para crear un paradigma cultural propio, incluyente, y descentralizado, que basado en nuestra tradición humanista nos dignifique como personas. Y también es cierto que la respuesta para una verdadera vida democrática no solo está en los partidos políticos, está auténticamente en el centro de la comunidad de la que siempre seguiremos formando parte. La efervescencia electoral aún no termina, pero habrá que trascenderla.

La transformación en Morelos será cultural o no será.