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María Katzarava, desde la línea azul del metro a la Dirección de la Ópera de Bellas Artes

 

El programa La Danza de la Vida nos ha llevado a conocer a la gran soprano María Katzarava, actualmente directora de la Ópera de Bellas Artes.  Una empedernida amante del talento mexicano que día con día trabaja por desarrollar y hacer evolucionar desde sus entrañas, el canto que por herencia nos acompaña en óperas ancestrales, las cuales espolvorean los vientos con sus notas atrapando los pechos desde donde emerge la conexión con la voz humana uniendo el instrumento del corazón, para estremecer al público haciéndonos reconocer a los grandes artistas visibles o invisibles de nuestro querido México.

María Katzarava ha estado prácticamente en todos los países del mundo, en recintos como el Teatro de la Ópera de Roma, Royal Opera House en Londres, Termas de Caracalla, Liceu de Barcelona Scala de Milán y ha compartido escenario con Vladimir Stoyanov, Andrea Bocelli, Plácido Domingo; Piotr Beczala, Irene Theorin y Arturo Chacón Cruz. Ha estado bajo la dirección de Yannick Nezet Seguin, Daniele Callegari, Zubin Mehta, Philippe Auguin y Alain Guingal y además, ha ganado múltiples concursos.  Es la primera soprano mexicana en ganar el concurso Operalia, pero también en sus inicios como estudiante la encontramos en la línea azul del metro. Es decir, desde el metro al mundo y del mundo a la dirección de la Ópera de Bellas Artes hoy en día. 

Entre la Lucía bipolar de Donizetti la escuché exigir a sus estudiantes todos los cambios e intenciones vocales para ir de una emoción a otra, el llevar los músculos abdominales hacia afuera, como si fuera la intención empujar el piano con el abdomen y llevar la voz al pecho, al esternón, para que sea franco y abierto el canto para conmover al público.  En ese sentido la Mtra. Katzarava menciona ir hacia el mariachi en sus clases. Aprender a sentir el tiempo interior del cantante es tan diferente, pues tarda en irse colocando en el pecho y de ahí se trata de no perder la conexión. 

Al utilizar ejemplos como el vendedor del gas, Lola Beltrán, y Heidi en la montaña de manera graciosa y sencilla propone coloraturas, timbres, intenciones, romanticismo y dramatismo, buscando transformar a través de sensaciones para de lo invisible traer a lo audible y conectar al unísono, moviendo y conmoviendo

En febrero de 2021 abrió Studio Katzarava, un centro de perfeccionamiento creado para cantantes, en una mañana en este hermoso estudio al cual fui invitada. Las clases iniciaron con una madre y su hermoso bebé, el impetuoso joven, la mezzosoprano estoica y fuerte, la diversidad presente de todas las formas desde colores en la ropa, pigmentación, economías, pero todos en el anhelo del encuentro de su propia voz.  Muchos de ellos invisibles para el mundo, pero visibles al abrir sus bocas generando vibraciones que viajan a los cerebros y retumban en las almas cercanas y la propia. Desde todas las perspectivas, la Mtra. Katzarava ha buscado la inclusión de los nuevos valores mexicanos en la escena nacional e internacional. Los anhelos para el país son muchos, las voces y el talento están dados. El México que canta, eleva sus notas entre voz y voz, intentos y acciones acontecen y pasarán los tiempos, pero nadie podrá decir que no existió la voz de un pueblo, las voluntades, los que vienen desde lejos en autobús,  porque en el centro de cada uno canta la voz humana que trasciende nacionalidades, instituciones, personalidades, géneros y nombres y, precisamente este es el objetivo de este artículo, hacer a los invisibles visibles, esos que se están armando vocalmente, esos que invierten en sus clases, aquellos que son padres o madres, o que desean cantar tan solo porque les apasiona y ha sido su sueño, o aquellos que pretenden abrir centros culturales o fundaciones. Algunos de ellos tienen la suerte de pisar el escenario, o compartir desde el palacio de Bellas Artes. La disciplina, la constancia, humildad, pasión y práctica, son factores como en todo arte que marcarán la diferencia entre un siguiente nivel y hacer la diferencia. Y así concluyo que en el tejido pequeño está la gloria de los grandes tejidos sociales y desde otra perspectiva enaltecemos la labor en el quehacer mismo de las pequeñas cosas que generan los grandes cambios humanos, que son la mayor herencia de mano a mano que pueda recibir otro ser humano. Gracias infinitas, gracias Mtra. María Katzarava por tu pasión y amor por México, conociendo desde la línea azul del metro, hasta la dirección de la Ópera de Bellas Artes a cada una de nuestras voces mexicanas.

Bailarina, maestra, directora, mentora, productora, conductora y promotora cultural.