Antonio Ponciano Díaz*
El siglo XXI se está caracterizado por un entorno de avances científico-tecnológicos altamente disruptivos que amenazan la tranquilidad de las personas y su condición como ser humano, sumado al calentamiento global que presagian fenómenos climáticos de efectos devastadores para el homo sapiens. La amenaza de nuevos virus está latente y el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania podría escalar y desatar una tercera guerra mundial o modificar la geopolítica económica mundial, estos son algunos escenarios que, sin duda, incidirán en la conformación de la sociedad del futuro.
Bajo este entorno de cambios acelerados que están modificando las relaciones económicas, políticas y sociales de las naciones en el mundo, me parece oportuno cuestionarse ¿Qué estamos haciendo los mexicanos para insertarnos con viabilidad en los cambios globales que se están experimentando? Analicemos solo algunos aspectos:
El impacto de la Inteligencia Artificial (IA).- El uso masivo de los Chatbot de IA como el ChatGTP ha sacudido a la sociedad mundial como uno de los avances tecnológico más revolucionario que amenaza la estabilidad laboral de muchas profesiones, pero, sobre todo, la inteligencia de los seres humanos. Señalan los expertos que estamos por entrar en la próxima década, sino es que antes, en la tercera etapa del desarrollo tecnológico de la inteligencia artificial conocida por las siglas ASI súper inteligencia artificial, la cual parece de ciencia ficción, pero sus efectos son reales y pueden ser peligrosos para la especie humana, porque será diseñada para aprender por sí misma y tomar decisiones superiores a un ser humano.
Si bien es cierto que el desarrollo de la inteligencia artificial afectara a los trabajadores, según el banco de inversión Goldman Sachs podría remplazar a un cuarto de todos los empleos realizados por los seres humanos, aunque también creara más productividad y nuevos trabajos. Justamente este es el punto de énfasis del artículo.
Ante este desarrollo de la inteligencia artificial a nuestro país lo coloca con una gran disyuntiva: quedarnos esperando que otros países se apropien de estos desarrollos tecnológicos y depender de ellos con todo lo que implican o aprovechar estas tecnologías que nos coloque en el tren del progreso y en la generación de nuevas oportunidades laborales. Urge una política de estado que aproveche esta oportunidad en vez de estar atorados solo pensando en una carcacha de la política del siglo pasado. Todo parece indicar que los mexicanos estamos más interesados en los temas domésticos producto de una visión estrecha de nuestros gobernantes que en el aprovechamiento de los grandes avances tecnológicos.
En el caso del calentamiento global, dicen los expertos que estamos a punto de superar el umbral de 1.5 °C lo cual traerá consecuencias para el planeta y serán irreversibles. Los científicos han lanzado una alerta preocupante. Ya empezamos a padecer algunos síntomas generados por las 4 ondas de calor que superan los 40° y que se manifiestan a lo largo y ancho de nuestro país, empieza a escasear el agua en algunas ciudades y cortes a la energía eléctrica en algunas ciudades que han traído defunciones en hospitales o las provocadas por los golpes de calor
Desde luego, sin tomar en cuenta que las políticas públicas de gobierno, para transitar al uso de energías limpias no están en el horizonte, el gobierno prefiere legalizar autos chocolates con fines electoreros o utilizar el carbón, altamente contaminante, en la producción de la energía eléctrica, en vez de iniciar campañas de prevención y concientización de los mexicanos para que seamos responsables en el uso de los desechos altamente contaminantes.
Estos son algunos de los grandes temas a debatir porque la miopía de las autoridades gubernamentales no quiere o no pueden ofrecernos un futuro mejor para todos los mexicanos.
*Ex catedrático de la UAEM
