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La paternidad puede mejorar

 

+ En Morelos, el 65% de los hogares tienen a un hombre como jefe de familia; de ellos, el 78% tiene una ocupación remunerada

+ El Día del Padre tiene una historia breve que en México apenas llega a los 78 años y solo la mitad de las familias lo celebra

+ La celebración para por escándalos y llamados a la moderación, hasta el aumento en el consumo de carnitas, barbacoa y cerveza

 

El 65% de los hogares en Morelos tienen un hombre a cargo; y el 78% de los padres en Morelos tienen una ocupación remunerada, por lo que la mayor parte de las familias morelenses tienen motivos para celebrar el Día del Padre.

En efecto, aún con las historias terroríficas sobre paternidades disfuncionales de las que nos enteramos a través de notas periodísticas, películas y series de televisión, pláticas familiares y manifestaciones públicas diversas, los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), evidencian que si bien la paternidad ha evolucionado aceleradamente hasta reducir los hogares con sistema patriarcal del 77 a poco menos del 65% en menos de una década, las paternidades tradicionales y responsables, aún son mayoría. Por lo que la mayoría de las familias tienen todavía mucho qué celebrar

Una celebración con poca historia

El origen del Día del Padre se localiza en los Estados Unidos. Sonora Smart Dodd, hija del veterano de la guerra civil, William Jackson Smart, decidió celebrar el tesón con que su padre la crio a ella y sus hermanos menores con un homenaje a la paternidad, para lo que propuso el cumpleaños del sargento Smart, el cinco de junio como un día de honor para los padres. Buscó a la Alianza Ministerial de Spokane, que respaldó su propuesta, pero para realizarse el tercer domingo de junio. La primera celebración fue en 1910; pero la desordenada década de los 20 en los Estados Unidos prácticamente la diluyó.

Fue hasta 1966 que el entonces presidente de Estados Unidos, Lyndon B. Johnson, firmó la proclama presidencial que estableció para la Unión Americana el tercer domingo de junio como el Día del Padre.

El festejo con sabor a México

El Día del Padre en México también nació del agradecimiento de una hija al amor y dedicación de su padre. María del Carmen Tostado Gamboa, quiso reconocer a los padres de México a través de la figura del suyo, Pedro Tostado Ontiveros, a quien desde 1937 le organizaban una comida.

Carmen Tostado supo de la celebración que, aún no con el aval gubernamental peso sí los social y religioso de tenía en los Estados Unidos por los padres y acudió a los periódicos locales y organizaciones civiles para apoyar su iniciativa. El principal respaldo vino de los periódicos locales de la región de La Laguna y de la iglesia católica, gracias a quienes el 15 de junio de 1946 se celebró por primera vez el Día del Padre, que instituyó oficialmente el entonces presidente, Manuel Ávila Camacho.

Solo la mitad de las familias los celebra

El festeo por el Día del Padre tardó más de dos décadas en permear a la sociedad, fue hasta los setenta que las televisoras nacionales y las grandes cadenas comerciales se apropiaron de él, y aún con ello, de acuerdo con el INEGI sólo el 50% de los mexicanos lo celebran. El Día de la Madre, en cambio, es una fiesta para el 70% de la población del país.

No obstante, la celebración ha ido sumando adeptos, especialmente desde los noventa, cuando las escuelas empezaron a hacer festivales para los padres, aunque algo diferentes a los que hacen para las madres. Los festejos a los padres en las escuelas regularmente incluyen actividades físicas de relación padre-hijo, en contraste con los bailables que los menores hacen para sus madres el 10 de mayo.

El escándalo de la COPRED

El 18 de junio de 2023, el Consejo para Prevenir y Eliminar la Discriminación de la Ciudad de México, en respuesta a las quejas interpuestas por madres solteras y madres en familias lesbomaternales por haber sido excluidas de las celebraciones del Día del Padre, emitió un pronunciamiento en que exhortó a las escuelas de nivel básico a “replantear sus festividades o conmemoraciones con motivo del ‘Día del Padre’ en las que se exalta un único modelo de familia y no se mira desde una perspectiva incluyente para todas las infancias”.

El documento señala que “estas celebraciones justifican los estereotipos en el aprendizaje de las infancias y no visibiliza la diversidad de familias, sino que refuerza su construcción de manera tradicional. Además, en su realización se les deja fuera, estigmatizando a las familias que no se ajustan a ese modelo tradicional, acentuando la exclusión, violencia y discriminación en contra de niños y niñas que no viven en familias tradicionales compuestas por un padre y una madre unidas en pareja”.

Como todo lo viral, el escándalo se fue tejiendo por meses y recién a través de redes sociales se manejó la versión de que el Copred prohibió la celebración del Día del Padre en las escuelas, ante lo que el Consejo emitió un comunicado en que aclara “el Copred jamás pidió o intentó eliminar el Día del Padre, esto es no solo descabellado pues se trata de una celebración de carácter social y arraigada, sino que escapa de la competencia y capacidades de esta institución”.

Y añade que “el núcleo del pronunciamiento fue invitar a la consideración acerca de cómo ciertas celebraciones deben ir acompañadas de reflexiones incluyentes que tomen en cuenta los contextos en que viven y crecen los niños y niñas y así evitar la discriminación y las violencias en entornos escolares”.

El festejo en Morelos

En contraste con los monumentos y plazas dedicados a la madre en Morelos, no hay registro de una estatua o plazoleta dedicada a los padres. Cierto que hay estatuas a quienes podrían considerarse padres del pensamiento de la Independencia, como José María Morelos; de la Revolución agraria, como Emiliano Zapata; y hasta padres de las ciudades, como Alexander Von Humboldt, pero una muestra de homenaje a la paternidad responsable no existe en el estado.

Pero esa fata no mina el ánimo de los miles de morelenses que celebran el día, a lo mejor sin tanto protocolo como el de las Madres, pero con casi igual entusiasmo. Los restaurantes esperan llenos, los establecimientos que venden carnitas, barbacoa, mariscos y hasta pollos rostizados incrementan sustancialmente sus ventas y también se elevan las de carbón para asador, cortes de carne y, sobre todo, las de cervezas, explicaron a la Jornada restauranteros, carniceros y personal de tiendas de autoservicio.