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A casi tres meses del asesinato del ex comisionado presidente del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE), las investigaciones que lleven al esclarecimiento del caso no muestran avances, confirmó el actual titular del organismo, Hertino Avilés.

“No ha habido como tal una determinación, solamente se nos ha informado la integración de la carpeta de investigación y los elementos técnicos que nos han solicitado y de carácter personal, mismos que hemos aportado”, expresó el comisionado.

Recordó que se trabaja en conjunto, en un sentido de colaboración interinstitucional entre la Fiscalía General del Estado (FGE) y el IMIPE, a fin de lograr el esclarecimiento de dicho asesinato; días posteriores al hecho, los propios integrantes del pleno del órgano de transparencia se dijeron dispuestos a la colaboración, incluso algunos rindieron declaraciones.

Es importante recordar que, el fiscal, Uriel Carmona Gándara, minutos posteriores al homicidio de Marco Alvear, refirió que, por las características del hecho, éste se trataría de un ataque directo contra el entonces funcionario.

Previo a ser asesinado Marco Alvear Sánchez, comisionado presidente del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE), había denunciado amenazas, informó Uriel Carmona Gándara, titular de la Fiscalía de Morelos, tras revelar que las líneas de investigación apuntan que el ataque pudo ser motivado por su actividad en el órgano de transparencia y derivado de pugnas internas.

Pese a que días después habría asegurado tener avances importantes, resaltando que se contaba ya con evidencia para poder identificar a los autores materiales lo que podría generar solicitar órdenes de aprehensión lo antes posible:

“Tenemos una buena base en la identificación de los autores materiales quienes accionaron una pistola en calibre 9 mm en contra del compañero Alvear, entonces vamos a tener un resultado pronto”, dijo, aunque hasta el momento no se haya concretado ninguna acción jurídica que permita ir resolviendo el caso.

Marco Alvear fue asediando el 21 de marzo pasado, a plena luz del día, cuando circulaba en su vehículo, a escasos metros de la sede del Ejecutivo; pese ocurrir el homicidio en pleno centro de Cuernavaca, quienes perpetraron el hecho, pudieron huir, sin que alguna autoridad lograra detenerlos.

Carmona Gándara también confirmó que Marco Alvear, sí se comunicó a números de emergencia para solicitar auxilio, ante una eventual persecución por parte de sus ejecutores.