loader image

Clara Viviana Meza y La Jornada Morelos


Luego de que los diputados aprobaron recientemente diversas reformas a la Ley del Servicio Civil en Morelos, la Diócesis de Cuernavaca desaprobó la decisión, al referir que no es justa ni resulta en beneficio de la ciudadanía.

En entrevista, el vicario Tomás Toral Nájera consideró que los legisladores no conocen la ética y actúan con total impunidad, por lo que urgió a vigilar sus acciones para que no se repitan.

“Ya habíamos pasado por esta situación, recordemos que en anteriores legislaturas ya se han otorgado estas llamadas pensiones doradas. Yo creo que alguien debe de vigilar porque hoy hace mucha falta la ética en todo este tipo de cuerpos legislativos”, expresó.

Al referir que la decisión no es justa, el vicario de la Diócesis de Cuernavaca se pronunció a favor del veto y conmino a los integrantes de la LV Legislatura a actuar conforme a Derecho.

Durante la última sesión ordinaria del Pleno del Congreso, los diputados aprobaron las reformas que les permitirán a ellos, así como a titulares de diversos organismos autónomos como la Fiscalía General del Estado (FGE), Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción (FECC) y la Comisión de Derechos Humanos Morelos (CDHM) acumular sus años de servicio en esos cargos para su posterior jubilación.

En contraste, el vicario aseguró que la Iglesia católica “por supuesto que está de acuerdo” con la Ley de Voluntad Anticipada, que permitirá a los enfermos terminales, y víctimas de accidentes muy graves, rechazar tratamientos médicos que aumenten su sufrimiento para extender su vida.

“Aunque sabemos que el sufrimiento como cristianos, católicos, creyentes, lo podemos ofrecer a Dios. Pero no es ese sufrimiento dado a través de las máquinas… encarnizado. Entonces, pues qué bueno que las personas puedan tomar esa decisión en torno a su propia vida con esta voluntad anticipada y decir ‘en caso de que yo tenga ese tipo de sufrimiento -no significa que me apliquen una inyección ni nada de eso, una eutanasia- sino ya no tiene sentido seguir con un sufrimiento encarnizado a través de las máquinas y demás que no me va a dar verdaderamente una esperanza de vida’”, concluyó.